Cuando Antonio Gasalla fue condecorado con la misma distinción, se refirió a Jorge Luz como el primero que se travistió para hacer humor, género que marcaría su carrera y lo llevaría a convertirse en uno de los más respetados actores-capo cómicos del país. Una semana después, Oscar Jorge Da Luz Do Santos Borbón -su verdadero nombre- recibió en el Salón Dorado de la Legislatura porteña, la declaración de "Ciudadano Ilustre", un sello de lujo en la trayectoria de este grande, que el 8 de mayo cumplirá 86 años y que fue ovacionado por una multitud.

De ascendencia portuguesa, Jorge fue el menor de cuatro hermanos, Juan, Carlos y Aída, y a edad temprana ya se dio cuenta de que lo suyo era la actuación, pero la gran oportunidad se la brindó Aída, quien trabajaba en Radio Argentina y donde a los 16 años Jorge debutó en un radioteatro. Con "Los Cinco Grandes del Buen Humor" su carrera hizo un giro inesperado y el ya conocido como Jorge Luz saltó a la fama nacional e internacional junto a Rafael Carret, Zelmar Gueñol, Guillermo Rico y Juan Cambón; en televisión incursionó con Operación Ja ja y luego hizo historia en la Tota y la Porota, con Jorge Porcel.

"Como ya no tengo hermanos, los tengo a todos los actores y actrices como mis hermanos", expresó en el acto, ante la presencia de, Olga Zubarry, Thelma Biral, China Zorrilla, su "hermana del alma’ -como definió a Elena Lucena- Pinky, Georgina Barbarossa, Víctor Laplace, Katja Alemann, Mirtha Busnelli, Néstor Fabián, Luis Brandoni, Lino Patalano, Irma Roy y Enrique Pinti, estos dos últimos quienes ofrecieron unas palabras al maestro: +En las democracias, la única realeza que se permite es la de los actores, y yo les digo que la reina es Niní Marshall y el rey es Jorge Luz", manifestó contundente su amigo Pinti.

Justamente es cuando Jorge habla de su experiencia en cine, que se torna inevitable mencionar a Niní Marshall, a quien admiró desde siempre, tuvo la oportunidad de trabajar y hasta asociarse con ella y de quien tomó ese vocabulario chabacano para algunas de sus interpretaciones, como la breve actuación que ofreció en el Palacio Legislativo, luego de que le entregaran su medalla y diploma: "Ven para acá porquería, inmundicia, basura de su madre, me dijo tímidamente mi madre cierto día y aún parece que escucho en el ambiente de su voz la celeste melodía", se despachó con gracia y con distintos tonos de voz.

El honor destaca a Luz como "ejemplo de labor incansable, mostrando a lo largo de su vida su talento al servicio de la realización artística de excelencia", elogio que el humilde actor recibió señalando que "el cariño de la gente es el premio más lindo".

"Yo tomo a todos los actores y actrices como hermanos míos, ya no tengo la vanidad que se tiene cuando uno empieza, yo nunca me la creía, lo juro por Aída", dijo. "Yo sé que Aída está aquí, entonces, Aída, te mando un saludo", agregó con lágrimas en sus ojos.

Y el broche de oro, emotivo por excelencia, fueron las palabras del ciudadano ilustre a uno de sus seres entrañables: "Este homenaje que me hacen a mí se lo dedico a mi querido amigo que salió de gira hace muy poco, Sandro", palabras que generaron un mar de aplausos del público presente. Jorge contó que antes de que internen en Mendoza el Gitano lo llamó por teléfono: "Hola Jorgito, te vi en un reportaje en televisión, cómo me hubiese gustado charlar con vos, chau genio", le dijo Sandro. "Quería grabarlo y no pudimos, y le agradezco a Dios, porque yo llego a oír esa grabación y el que se va de gira con él soy yo", expresó conmovido.