Estudio en el colegio de la Universidad Católica de Cuyo, al finalizar el secundario partió a estudiar Ciencias Políticas en la UCA, Bs. As, porque cuando era chica quería ser presidenta, trabajar en política y vivir en otra ciudad. Rosario Ahumada se recibe a los 23 años y trabajó durante 10 años en la capital porteña, como asesora en el gobierno de Buenos Aires. Al pasar un tiempo se dio cuenta que no se sentía cómoda, por lo tanto buscó otros caminos. Es realmente cuando logra su lugar y comienza a trabajar en una ONG, que trabajaba como una empresa B, social. Este sería su punto de partida para conocer y adquirir experiencia en este nuevo prototipo de empresas.
Su último trabajo en Buenos Aires fue en la fundación de Andy Freire, reconocido y famoso emprendedor, promoviendo el espíritu de emprendedurismo en la base de la pirámide. 

"Se entiende por empresa social, aquella que es un mix entre una ONG y una empresa, posee una fuerte misión social y o medio ambiental y busca ser autosustentable económicamente, es decir generar ingresos y ganancias a través de un producto o servicio’, explicó Rosario.

Después de esos 10 años en la capital, decidió volver a su provincia y probar suerte. Una vez en San Juan, creó su empresa "Juno". En un principio lo hacía como un hobby, "querer hacer algo social mezclando un montón de experiencias laborales que traía de Bs. As’. Flexibilidad de entender la importancia del trabajo familia, trabajar con emprendedores de bajo recursos, son algunos de los peldaños que elaboró como plataforma, nucleando mujeres que pudieran ofrecer un producto o servicio desde su casa y comercializarlo, así nace Juno. 

En medio de su trabajo, aplicó una beca que promovía el departamento de Estado de los Estados Unidos, para emprendedores y gente relacionada con ONG y fundaciones. La gran noticia es que María del Rosario Ahumada quedó seleccionada para vivir la experiencia, la única de San Juan, junto a otros jóvenes Argentinos. El premio de quedar becada era presentar el modelo de emprendimiento de su autoría. La beca era no solo las semanas de experiencia laboral, sino también contaba con todos los gastos de vivencias y salidas y además las entrevistas con posibles inversores. Viajaron 250 chicos y el desempeño era de 6 semanas; la primera semana estuvieron todos juntos en Dallas en una conferencia y charlas de tipo motivacional y de liderazgo, luego se separaron en 21 ciudades. La sanjuanina viajo con 15 personas a Portland, una ciudad del estado de Oregón en el noroeste de Estados Unidos. Esa ciudad tiene un sistema ecoemprendedor muy desarrollado, muy sustentable y con el mejor sistema de transporte de EE. UU., sin escapar a los problemas sociales. En Pórtland, durante las 4 semanas trabajó dentro de la Universidad, en el sector de emprendedores con impacto. Allí el emprededurismo está bien posicionado y desarrollado, ayudan a las personas que poseen grandes ideas sociales. A la par de su trabajo en la universidad pudo tener experiencias con diferentes empresas del sector. La última semana de viaje fue en Washington, los argentinos fueron invitados por la embajada Argentina y mantuvieron una reunión con integrantes y el embajador Argentino Martín Lousteau y su esposa Carla Peterson.

"El broche de oro fue la invitación al Departamento de Estado a una charla con "Richard Branson’, un magnate de negocios inglés; conocido por su marca Virgin, luego fuimos agasajados con una cena en el salón "Benjamin Franklin’, un cuento de hadas agrega Rosario.

 

Entre desafíos y miradas

"La mirada de los norteamericanos acerca de los jóvenes emprendedores argentinos es que superan las expectativas del nivel de conocimiento y desarrollo de soluciones, frente a problemáticas sociales y globales que vivimos aquí.

Lo que más cargué en mi mochila de experiencias son las relaciones que pude construir entre pares, tanto de Latinoamérica como del Caribe. 

En la Argentina ser emprendedor es bastante difícil y los americanos lo saben, por lo tanto la consideración es mayor y son grandes colaboradores. 

A San Juan le hace falta diversificar su industria y actividad económica, somos una provincia minera, depende mucho de esto, pero creo que necesitamos además pensar en otros recursos y fuentes. Nos falta aprender a trabajar entre diferentes sectores, colaborando e intercambiando y no verse como enemigos. En realidad hoy el éxito es de grupos de trabajo y mirar un poco más afuera’. 

 

El galardón

Un desafío como este es lo que mejor me paso en mis 28 años. Hace poco di una charla para Endeavor, una fundación que nuclea a emprendedores; el mensaje que doy es animarse a empezar, diversificar lo que hacemos, el aprendizaje es lo más valioso, aún más que un master, buscar trabajar en equipo y no tener miedo de compartir tus conocimientos, tener una idea no vale nada hasta que consigues tu cliente y ese canal es un abismo de horas de trabajo y sacrificios. Construir algo que sirva a San Juan, pero que a la vez puedas vender u ofrecer en otros lugares’.

Rosario acaba de llegar de recibir un premio dado por la "Unión Argentina de Jóvenes Empresarios’ por el modelo de su empresa Juno. 

 

Juno consiste en conectar empresas y organizaciones con productos y servicios textiles desarrollados por mujeres que trabajan desde su casa. Promoviendo ciertos valores como el balance trabajo familia, el comercio justo y la revalorización de lo artesanal. Se trabaja con mujeres que no son profesionales y que por alguna razón no pueden salir de su casa. En estos momentos estamos enfocados en el sector gastronómico y hotelero con mantelería, delantales, servilletas y otros. Además, desarrollando nuestra propia marca de manteles para mujeres en general, el sustento está puesto en la mesa familiar de cada hogar. Así está pensado el relanzamiento de Juno, bajo estos conceptos, diseño y confección. Este trabajo se lleva a cabo bajo la supervisión de dos diseñadoras en indumentaria y mi socia Daniela Sánchez junto a las mujeres que confeccionan.

La misión de Juno es empoderar mujeres, porque en Argentina hay más de 2 millones de mujeres que son jefas de hogar y madres solteras, lo cual implica que si ellas quieren salir a trabajar sus hijos quedan expuestos y solos.

Convencidos en que la mujer puede romper el círculo de la pobreza y sacar su familia adelante. De hecho está estudiado que la mujer en situación de vulnerabilidad o de problemática y adversidad, es la que queda en casa. 

Juno suma un granito de arena frente a la situación de pobreza. Además en la actualidad vemos mucho la figura de la mujer expuesta frente al flagelo de violencia de género; no solo se trata de violencia física sino también es la denigración psíquica encerrándola en casa y dependiendo del hombre. La idea es brindar las herramientas necesarias para que puedan valerse por sí mismas, haciéndose respetar, valorizarse y quererse.

www.junotrabajosremotos.com 
@junoremotos

Fotos: Federico Levato

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