Ayer, el ministro de Salud Pública, Castor Sánchez Hidalgo, insistió públicamente que no hay un brote de meningitis en la provincia y recomendó a la población no ’salir desesperada a vacunarse’. Pese a esta sugerencia hubo una alta demanda de vacunas contra el meningococo (bacteria) en las farmacias que se vieron obligadas a reabastecerse. Esto se debe a que se trata de un producto poco común y caro (cuesta entre 1.490 y 1.565 pesos) por lo que el stock en el mercado es limitado. Todo esto se generó tras la muerte de Carla Acosta, de 21 años, a causa de meningitis por meningococo. Falleció luego de 6 días de la muerte similar de Ivo Lampasona, el chico de 15 años que también tuvo esa enfermedad. A éstos se sumaron los rumores de otros casos de meningitis que el Ministerio de Salud salió a desmentir.
Ayer al mediodía las farmacias Echegaray, San Martín, San Pantaleón, Buenaventura, Cuyo y Sabín agotaron el stock de vacunas contra el meningococo por la demanda de la gente. Los encargados de estos negocios además afirmaron que recibieron muchas consultas sobre la disponibilidad de este producto por lo que decidieron reabastecerse. Hicieron un pedido de vacunas al laboratorio para tenerlas disponibles durante la tarde.
Por su parte, el ministro de Salud, Castor Sánchez Hidalgo, aclaró que el Estado dispone de vacunas gratis contra el meningococo pero que son exclusivas para pacientes inmunodeprimidos e insistió que es ’improductiva la vacunación masiva’, ya que la meningitis es una enfermedad que aparece en forma esporádica por lo que el impacto de la vacunación “no es efectiva y es muy costosa”. “Hemos atacado el entorno de las víctimas de forma profiláctica. La vacunación por estos casos aislados no es indicada”, dijo el funcionario.
Por otra parte, el ministro descartó que en la provincia haya un brote de meningitis. Dijo que lo que alarmó a la gente fue que los dos casos fatales ocurrieran en menos de una semana y que ambos pacientes fallecieran a escasas horas de haber revelado los síntomas. También descartó que se hayan registrados más casos de esta enfermedad, desestimando algunos rumores y audios que comenzaron a circular por Whatsapp.
El primero de los rumores fue el caso de una mujer mayor de edad (no precisó de cuántos años) que murió en una clínica privada hace unos 20 días y que por los síntomas se sospechó que se trataba de un caso de meningitis por meningococo. El otro caso es una mujer de 55 años que ingresó al Hospital Español hace unos días con síntomas que se asemejaban a los de una meningitis, pero que no se trataba de esta enfermedad. Fue controlada y dada de alta. “Hasta ahora no hay más casos de meningitis registrados en ningún centro de salud. De todos modos ya hemos comunicado la situación al Ministerio de Salud de la Nación para que esté al tanto. Además, hemos enviado un protocolo de acción a cada centro de salud para que ante un caso sospechoso de meningitis sepan cómo actuar e informar de inmediato al Ministerio para que tome cartas en el asunto”, dijo.
Para saber más
La enfermedad. La meningitis es una infección que causa la inflamación de las meninges, membranas que recubren el cerebro y la médula espinal. Sus síntomas son fiebre, rigidez en el cuello, nauseas y vómito, dolor de cabeza severo, sensibilidad a la luz, agitación, confusión.
Vía de contagio. Esta enfermedad neurológica se trasmite a través de las secreciones nasales, la saliva y el aire contaminado. La meningitis se combate con antibióticos. Los más comunes de ellos son la ampicilina, cefalosporinas, gentamicina y vancomicina.
Prevención. Lavarse las manos con agua y jabón, con frecuencia. Cuidar la higiene personal y la del hogar. Taparse la nariz y la boca con un pañuelo al toser o estornudar. Ventilar las habitaciones y las aulas. No compartir vasos, cubiertos, mamadera, juguetes y alimentos.
Una muerte inesperada y rápida
‘Sin poder contener las lágrimas por el dolor y la tristeza, Trinidad contó como fueron los últimos momentos de vida de su nieta Carla Acosta que falleció en menos de 3 horas a causa de una meningitis fulminante. Contó que el marte por la noche Carla llegó del gimnasio con un fuerte dolor de piernas y fiebre por lo que se tomó un analgésico. Agregó que al día siguiente vomitó a penas se levantó y que continuaba con el dolor y la fiebre. ‘Ella era muy sana por eso me extrañó verla mal. A las 13 llamé un remís y la llevé al hospital y de ahí no la volví a ver más. Falleció a las 15,40. No sé cómo vamos a soportar este dolor’, dijo la mujer que describió a su nieta como una chica familiera a la que le gustaba hablar de Dios.