* A nivel individual: cuando existe una tentación a ser infiel, se debe realizar un trabajo de introspección para evaluar qué necesita esa persona en ese momento de su vida para ser feliz y por qué lo está buscando fuera de la pareja. Se debe evaluar los costos de la decisión que se tome, puesto que elegir algo implica hacerse cargo responsablemente de los renunciamientos y pérdidas que esa elección incluye, más aún, cuando las decisiones personales involucran el destino de una familia.
* Reforzar la comunicación en la pareja: no dar nunca por sentado que la pareja debe adivinar lo que se está necesitando. Se debe aprender a ser abierto en la expresión de las necesidades, expectativas y deseos, para darle la oportunidad a la otra persona de hacer algo para complacernos. Al mismo tiempo, preocuparnos por chequear a través del diálogo, si estamos contribuyendo a la felicidad del otro.
* Incluir tiempo exclusivo para la pareja: Para mejorar la comunicación y el diálogo, se debe destinar tiempo a solas para tratar los temas atinentes a la pareja (por ejemplo, salidas semanales, pequeños viajes, etc.).