En diálogo con DIARIO DE CUYO, el gerente general de Casinos, Mario Pereyra, sostuvo que se trata de un tributo muy amplio y que deja al borde del cierre a muchos lugares. “Inevitablemente si se aprueba la ley arroja a las empresas al quiebre. Por el aumento desmedido deberíamos quitar máquinas y eliminar puestos de trabajo”, explicó. Del mismo modo remarcó que el impuesto se elevaría a 40.000 pesos por máquina más el 0,75% de cada apuesta.
La reforma del impuesto a las ganancias que se debate hoy en el Congreso contemplaría una carga impositiva mayor sobre la industria de juegos de azar. Por este motivo, empleados, empresarios y gremialistas decidieron sumarse al paro nacional por un posible aumento al gravamen que rige actualmente, lo que implicaría el cierre de salas y el despido de miles de trabajadores.
La manifestación, que se concentró en el cruce de Mendoza y Mitre, se movilizó por las calles del microcentro sanjuanino en repudio al gravamen que en el Congreso intentan imponer.