Buenos Aires, 8 de mayo.- Con el pedido de absolución del sacerdote Julio César Grassi, acusado de 17 hechos de abuso sexual y corrupción de menores, finalizó hoy la etapa de alegatos en el juicio que se sustancia contra el religioso en los tribunales de Morón, donde decenas de seguidores acompañaron la jornada con una imagen de la Virgen de Luján de más de dos metros de altura.

Ahora la fiscalía y la querella presentarán réplica el 14 de mayo próximo, cuando se reanude el juicio, por considerar que los abogados de Grassi injuriaron durante el alegato a los jóvenes denunciantes, al calificarlos de mentirosos y extorsionadores.

"Las denuncias contra Grassi son falsas y los denunciantes mintieron", dijo Daniel Cavo, al salir de la última audiencia en la que dijo que ratificó la inocencia del cura y pidió un veredicto absolutorio.

Cavo, en su exposición de hoy, se refirió a la pericia psiquiátrica practicada al religioso en el marco de la causa Calafate e hizo un análisis de los hechos que llevaron a su cliente a comparecer ante un tribunal durante casi nueve meses.

"Fue un mamarracho la declaración en el juicio de los peritos de Santa Cruz sobre la pericia psiquiátrica practicada a mi cliente. Esa pericia no concluyó que el imputado tenga un perfil de delincuente sexual", dijo el abogado defensor.

La jornada de hoy cerró una semana de alegatos por parte de la defensa del cura. Antes fue el turno de la Fiscalía y de los abogados querellantes.

El fiscal Alejandro Varela había pedido hace 20 días una condena de 30 años y prisión efectiva al momento de la sentencia al ratificar la totalidad de los hechos denunciados.

"El perro guardián del rebaño era el lobo que lo guardaba para su provecho", dijo durante su alegato. Unos días después, Juan Pablo Gallego, en su condición de abogado del Comité de Derechos del Niño y en representación de "Ezequiel" -uno de los tres menores denunciantes- pidió 37 años y prisión efectiva para Grassi, a quien responsabilizó de "haber manchado a la Iglesia Católica y de ampararse en las instituciones".

En tanto el abogado Sergio Piris, representante del joven conocido como "Gabriel", solicitó 20 años, mientras que el letrado de "Luís", Jorge Calcagno, pidió 25 años de cárcel. Ambos coincidieron en pedir al tribunal que disponga su detención al momento de la sentencia.

Hoy, decenas de seguidores de Grassi se acercaron a los Tribunales de Morón, donde colocaron en la entrada del edificio la imagen de la Virgen de Luján, a la que ofrecieron sus rezos.

Al entrar en el edificio esta mañana, Grassi saludó a sus seguidores con un "Feliz día de la Virgen", tras lo cual se dirigió a los periodistas y les dijo: "Me preocupa dejar en claro que no soy lo que dicen que soy, quiero que me dejen ser sacerdote".

Además dijo que esperaba "ser absuelto" y que la Fundación Felices Los Niños "es como un adolescente de 15 años que no puede estar sin su papá".

Más tarde, cuando salió de la audiencia, el cura manifestó su emoción por los conceptos vertidos en el cierre del alegato que, según Grassi, "dejó en claro su inocencia, con ética y altura jurídica".

"La idea nunca fue devastar la figura de los testigos ni de los denunciantes", dijo Grassi. Sin embargo, Piris consideró que "la defensa atacó a los tres denunciantes, se los tildó de mentirosos y fabuladores. Y en el marco de un proceso por abuso sexual infantil, eso es gravísimo".

"La defensa mintió, distorsionó situaciones y aseveró hechos que no existieron", dijo el letrado, quien explicó que esa conducta motivó el pedido de réplica que se hará el jueves próximo, cuando tome la palabra el fiscal Alejandro Varela, tras lo cual hablarán los tres abogados querellantes, Piris, Calcagno y Gallego.

Se prevé que la defensa podría responder a esta réplica durante la jornada del 19 de mayo para pasar luego al momento en que el tribunal le otorgará la palabra a Grassi, y finalmente dictará sentencia.