El aplauso del público surgió espontáneo en varios pasajes de la reunión, no sólo en la pelea de fondo, sino también en los combates entre amateurs, donde se vieron algunos valores interesantes como Fabián Alvarez, un ligero que es entrenado por Juan de Dios Acosta en el club Estrella Juniors y Mauricio Carrizo, un pluma producto de la escuela “Fito” Fernández. Sin embargo el match que hizo explotar la pasión popular fue el de los pesados en el que Andrés Sarruf le ganó por puntos (decisión abucheada por la gente) al cordobés Carlos Díaz. El sanjuanino, al igual que en su presentación anterior no supo hacer valer su mayor fortaleza (se encima sobre el rival quitándose espacios impidIendo que sus golpes tengan recorrido y lleguen con potencia) y terminó confundido ante un adversario más joven y extremadamente obeso, que se ganó el afecto del público por su guapeza y determinación para conectar algunos golpes netos que frenaron al local y terminaron encendiendo a la afición que lo despidió con un “olé, olé, olé, olé, gordo, gordo”.