Buenos Aires, 31 de marzo.- Pese a que nada queda por pelear, mucho queda por hacer en este River caótico, que camina por el borde de un ambismo previsible pero nunca tan real como el de estos tiempos en los que las decisiones se harán sentir en el seno del plantel.

Pese a contar con un plantel limitado en cantidad y calidad, el técnico Leonardo Astrada tomaría la decisión de desafectar del plantel profesional a aquellos jugadores de trayectoria en Primera que no han rendido en su ciclo.

Los nombres que encabezan la nómina son el de Diego Barrado, Matías Abelairas y Rodrigo Rojas, este último un refuerzo que se insinuó como prometedor luego de convertir su primer gol con la camiseta de River ante Boca, en un superclásico de verano.

Pero los desempeños de éstos durante la campaña de Astrada fue, cuanto menos, decepcionante, y el entrenador considera que ya han tenido las oportunidades suficientes para recomponer su fútbol.

Además de los mencionados, quienes ya quedarían relegados de los últimos partidos, otros futbolistas como Gabriel Funes Mori, uno de los más bancados por el DT, y que tan poco han rendido, serán terminantemente evaluados.

La finalidad de Astrada será encarar las útlimas fechas del torneo con aquellos jugadores que le transmitan la actitud suficiente como para creer que aún se pueden sumar puntos que, aunque no sirvan para levantar un trofeo, se vuelvan vitales para el promedio que viene, ese que tanto amenaza.