Rotura de las baterías primero y falta de combustible después. Eso fue lo que dijo el intendente Gustavo Núñez a la hora de explicar por qué no ha sacado los dos patrulleros comunales a custodiar las calles del departamento. La situación lleva casi 3 meses y 9 de Julio es el único de los 19 municipios que se quedó sin el servicio adicional de vigilancia que viene de la gestión anterior. El funcionario explicó que tenían otras urgencias y prometió que con una ayuda que recibió del Gobierno central, hará funcionar las movilidades en estos días.

Los patrulleros comunales forman parte de una estrategia que implementó el Gobierno giojista y que continúa el de Sergio Uñac, en un intento por reforzar la vigilancia en los departamentos y darle pelea a la inseguridad. La Provincia se hace cargo de comprar las unidades y del sueldo de un efectivo policial por cada una y los municipios deben correr con el costo de mantenimiento y el chofer. Pero en 9 de Julio, el municipio no cumplió su parte y las movilidades están fuera de servicio.

“Sí, no están saliendo”, dijo Núñez ante una pregunta de este diario. Después, reconoció que viene pasando desde que asumió al frente de la comuna, el 10 de diciembre, y dio los motivos. Primero, dijo que se rompieron las baterías. Segundo, cuando las arreglaron, contó que “no teníamos plata para el combustible”.

Los dos patrulleros que están parados son de la primera compra que hizo el Gobierno para implementar el sistema, allá por 2012 (ver aparte). Y de la última adquisición, a 9 de Julio le corresponde uno más y falta que el concesionario lo entregue.

La puesta en marcha del plan de patrullaje municipal tiene que ver con un tema sumamente sensible como la seguridad. Sin embargo, Núñez aseguró que no normalizaron la situación antes porque “le dimos prioridad a otras cosas”, como atender las consecuencias que dejaron las contingencias climáticas de verano. Además, como minimizando la cuestión, aseguró que “9 de Julio es un departamento tranquilo”.

El clima afectó a varios distritos de la provincia y no parece haber sido motivo suficiente para frenar durante meses los móviles municipales. Es común que existan roturas que obliguen a sacar de servicio temporalmente a alguna unidad y así y todo, según afirmaron fuentes policiales, el servicio está funcionando en los demás departamentos.

El intendente basualdista contó que la situación está a punto de normalizarse gracias a “una ayuda que nos dio la Provincia”. Y sin dar fecha, señaló que “en los próximos días” los patrulleros van a estar en la calle. “Nos estamos acomodando”, agregó.

La ausencia de los patrulleros nuevejulinios se conoció por una serie de quejas que sonaron en aquel distrito por varias razones, incluyendo la paralización de la ambulancia municipal y de una movilidad que se usa para trasladar discapacitados. El intendente reconoció que la primera estuvo rota y que recién empezó a funcionar “a los 20 días de enero más o menos”. De la otra, aseguró que “es mentira”. “Tenemos tres para chicos con discapacidades y todos los días los llevan y los traen”, sostuvo Núñez con molestia.