El periodista español Pablo González, detenido en 2022 en Rzeszow, Polonia, ha sido puesto en libertad como parte de un intercambio de prisioneros.

Así lo ha informado su defensa en un comunicado. También se ha informado de que el periodista vasco, que en el momento de su detención se encontraba informando sobre la llegada de refugiados ucranianos a esa localidad polaca tras la invasión rusa, ha sido trasladado a Rusia tras dos años y cinco meses encarcelado.

Pablo González, colaborador freelance del diario Público y La Sexta, fue arrestado la noche del 27 al 28 de febrero del 2022 en Przemysl, Polonia, poco después del inicio de la invasión de Ucrania, bajo sospecha de realizar operaciones en beneficio de Rusia aprovechando su condición de periodista. Aunque nunca se presentaron cargos formales, González ha permanecido recluido en una celda sin ventanas de alta seguridad en la cárcel de Radom, donde pasaba 23 horas diarias.

Polonia sostiene que González utilizaba los nombres Aleksey Rutsov o Pavel Rubtsov, que son sus nombres de nacimiento, y fue detenido con pasaportes españoles y rusos. Las autoridades polacas consideran esto y las transferencias mensuales de 350 euros de su padre desde Moscú como pruebas de su vinculación con el Kremlin. González tiene doble nacionalidad debido a que es nieto de un niño de la Guerra Civil española trasladado a Rusia y está inscrito con ambos nombres en el Registro Civil de Vizcaya desde 1991.

En el mayor canje de prisioneros entre Rusia y Occidente desde la Guerra Fría, medios internacioles informa que también se liberó este jueves al periodista estadounidense Evan Gershkovich y a otra veintena de personas, incluyendo al exmilitar Paul Whelan. A cambio, Estados Unidos, Alemania y Eslovenia entregaron a varios ciudadanos acusados de espionaje o asesinato, incluyendo a González.

Estados Unidos negoció durante meses la liberación de Evan Gershkovich, detenido en marzo de 2023 mientras informaba sobre la guerra en Ucrania. Acusado de espionaje, fue condenado a 16 años de cárcel en un juicio relámpago, lo que indicó la intención del Kremlin de acelerar un intercambio. El presidente Joe Biden prometió intensificar los esfuerzos para traerlo de regreso. Reporteros sin Fronteras expresó alivio por su liberación, destacando que Gershkovich no debería haber pasado un solo día en prisión por su labor periodística, y recordó que más de 40 periodistas siguen detenidos en Rusia.

La operación, que según la cadena turca ‘NTV’coordinada por la Organización Nacional de Inteligencia de Turquía, tuvo lugar en Ankara y fue el resultado de intensas negociaciones, y ha resultado en el intercambio total de 26 prisioneros. Este intercambio sigue a otros notables, como el de diciembre de 2022, cuando Rusia intercambió a la baloncestista Brittney Griner por el traficante de armas ruso Viktor Bout.

Todo el proceso, es decir, “el intercambio de periodistas presos” marca un “hito significativo en favor de la libertad de todos los periodistas que se encuentran en estos momentos presos en diversos países”, continúa el escrito.

Este acto se ha llevado a cabo por razones humanitarias, reconociendo la importancia del periodismo en la sociedad. El éxito del intercambio se debe a intensas negociaciones y un exhaustivo trabajo jurídico, que establecieron un marco legal adecuado y garantizaron el respeto a los derechos y la dignidad de los periodistas involucrados.

La radiotelevisión pública turca ‘TRT’ informó que los afectados llegaron a Turquía en siete aviones procedentes de Estados Unidos, Alemania, Polonia, Eslovenia, Noruega y Rusia. Diez personas, incluidos dos menores, se trasladaron a Rusia tras el intercambio en el aeropuerto de Ankara. De las 16 restantes, 13 volaron a Alemania y tres a Estados Unidos.

González, a través del comunicado de su defensa, ha querido agradecer el “interés real” de las autoridades rusas en liberarle mientras “otros se han centrado principalmente en criminalizarle”. Esto puede ser una referencia al descontento que la familia de Pablo González ha expresado con el Gobierno español, acusándolo de no haber hecho nada para ayudar al periodista, criticando especialmente la falta de acción del presidente Pedro Sánchez durante su visita a Polonia en junio de 2022.