Uruguay alcanzó el martes 20 de julio el 70% de su población inoculada con al menos una dosis contra el Covid-19, de acuerdo al monitor oficial de vacunación, en medio de una abrupta desaceleración de los peores indicadores de la pandemia.
En el país sudamericano de 3,5 millones de habitantes, alrededor de 2,48 millones de personas recibieron al menos la primera inyección de las vacunas de Sinovac, Pfizer o Astrazeneca. Mientras tanto, 2,09 millones (59%) cuentan con el esquema completo.
De tomarse en cuenta solo a la población objetivo en esta etapa avanzada de la inmunización, es decir todos los mayores de 12 años, la nación habría vacunado entonces al 84% con el primer componente y al 70% con el segundo.
Los excelentes índices de vacunación en Uruguay van de la mano con una abrupta caída de los contagios, muertes e internaciones en Unidades de Terapia Intensiva (UTI) con motivo en la enfermedad infecciosa, que se comenzaron a registrar a principios de junio.
Hasta el lunes 20 de julio, se contabilizaban 4.082 casos activos, un pronunciado descenso desde el pico alcanzado a fines de mayo, cuando el país que integra América del Sur llegó a tener 36.121 personas cursando la enfermedad.
Asimismo, luego de permanecer durante varias semanas como la nación con mayor número de muertes diarias en relación a su densidad poblacional, con un récord de 79 decesos el 15 de abril, en los últimos 7 días promedia 8 fallecimientos diarios.
Basado en estos auspiciosos resultados, el presidente Luis Lacalle Pou, que nunca decretó confinamientos obligatorios, dijo que espera la confirmación de la tendencia para flexibilizar el cierre de fronteras en la primavera austral.
Mientras tanto, varias actividades comienzan a quedar enmarcadas dentro de la conocida "nueva normalidad". Entre ellas, se incluye el regreso durante el presente mes de julio de las clases presenciales de todos los niveles educativos.
Si bien Uruguay registró el sábado sus primeros casos de la variante Delta, con 26 personas contagiadas tras viajes al exterior, las autoridades esperan que el nivel de vacunación atenúe el impacto de la cepa detectada por primera vez en India.