El presidente colombiano, Alvaro Uribe, contrajo gripe A y su Gobierno emprendió, vía diplomática, una alerta a todos los gobernantes y personas que participaron en la Cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en Bariloche (Argentina) el viernes pasado.

El mandatario colombiano, que anoche se mantenía en reposo y aislado en la Casa Narino (de Gobierno), presentó molestias desde el pasado viernes en Bariloche por lo que a su llegada a Colombia el sábado se le hicieron análisis que dieron positivo para el virus H1N1.

"Siguiendo los protocolos de manejo clínico, el gobierno está procediendo a informar, a través de los canales diplomáticos, a los asistentes a la cumbre de Unasur a fin de que se tomen las medidas correspondientes", precisó anoche el secretario de Prensa de la Presidencia, César Velázquez.

El ministro de la Protección Social, Diego Palacio Betancourt, también confirmó que Uribe está contagiado, pero aseguró que "evoluciona satisfactoriamente" al tratamiento médico y no delegará sus funciones.

Uribe empezó a sentirse mal al regresar el viernes de esa cumbre en Argentina, se quejó ante sus acompañantes de sentir dolor de cabeza y al llegar a Bogotá tenía fiebre, recordó el ministro Palacio Betancourt.

El sábado, sin embargo, el jefe del Estado encabezó un consejo comunal de Gobierno en Puerto Carreño, capital del departamento de Vichada (este), fronterizo con Venezuela.

Al regresar de Puerto Carreño presentó nuevos episodios de fiebre y se conocieron los resultados de las pruebas por lo que se inició su tratamiento con medicamentos.

Uribe viajó en el mismo avión con los ministros de Relaciones Exteriores, Jaime Bermúdez, y de Defensa, Gabriel Silva; con el comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla, el secretario de Información y Prensa y varios periodistas.

Uribe participó en la Cumbre de Unasur que amenazaba emitir un documento para rechazar la instalación de bases militares de EEUU en Colombia. Pero finalmente no hubo condena para Uribe. De todos modos, parece que se llevó un mal recuerdo argentino.