Al menos 33 personas murieron ayer en dos ataques atribuidos al grupo islamista radical Estado Islámico (EI) en la región fronteriza entre Turquía y Siria, informaron autoridades de ambos países. El más letal de los ataques se produjo cuando un fuerte estallido se registró en el patio de un centro cultural kurdo en la localidad turca Suruc.
