El ingeniero y legislador centrista Francisco Sagasti fue elegido ayer por el Congreso como presidente interino, el tercero que ocupa el cargo en una semana, en un intento de apaciguar una profunda crisis política y la agitación en las calles.
Sagasti, de 76 años y congresista del centrista Partido Morado, recibió 97 votos de apoyo y 26 en contra para encabezar una nueva junta directiva del Congreso unicameral, lo que constitucionalmente significa que asumirá la presidencia del país.
"Lo principal para Perú es retomar la estabilidad y que esta pesadilla termine", dijo a periodistas el legislador Alberto De Belaunde, del Partido Morado, antes de la votación.
La elección se realizó un día después de la renuncia del mandatario encargado Manuel Merino y en medio de una ola de protestas que dejó dos muertos y decenas de heridos, luego de la impopular decisión del Congreso de destituir hace una semana a Martín Vizcarra por denuncias de corrupción.
Sagasti, exfuncionario del Banco Mundial, deberá completar el mandato gubernamental que culmina en julio del 2021 y que incluirá la celebración de elecciones generales el 11 de abril.
El político centrista se convierte en el cuarto presidente de Perú en menos de tres años, tras la renuncia de Merino y la destitución de Vizcarra -los dos en una semana- y de la dimisión de Pedro Pablo Kuczynski en 2018, acorralado por acusaciones de corrupción.
La designación de Sagasti apunta a calmar las protestas lideradas en su mayoría por jóvenes cansados de los políticos tradicionales, pero también a los mercados financieros.
El sol peruano cayó ayer, antes de la elección de Sagasti, un 0,63% a 3,663/3,667 unidades por dólar, un mínimo histórico; mientras que el referente de la Bolsa de Lima subía un 1,82%.
Festejos y luto
La elección de Sagasti fue saludada con aplausos en una céntrica plaza de Lima, mientras que en otro lugar de la ciudad sepultaban a las víctimas de la protesta.
La crisis comenzó cuando Vizcarra, un popular centrista que tuvo como bandera la lucha contra la corrupción, fue acusado de recibir unos 640.000 dólares en sobornos de dos empresas que ganaron obras cuando fue gobernador hace siete años.
Tras un segundo juicio político en dos meses, Vizcarra fue expulsado por el Congreso dominado por la oposición. Pero Merino, que reemplazó a Vizcarra porque era el jefe del Congreso, se vio asediado por las protestas y renunció.
La consultora Citi Research dijo en una nota que Sagasti probablemente ayude a suavizar la situación de crisis y que respaldará los mercados, donde los bonos soberanos cayeron temprano en medio de temores de un vacío legal. Sin embargo "es probable que las tensiones sigan siendo altas por ahora, y la situación coloca riesgos a la baja en nuestras perspectivas macroeconómicas", agregó.
Shamaila Khan, directora de deuda de mercados emergentes en Alliance Bernstein en Nueva York, dijo que se necesitaría un "extremo" candidato a golpear fuerte a los bonos peruanos.
"La volatilidad política ha sido parte del panorama peruano durante algún tiempo", dijo. "Algo tendría que ser radicalmente diferente para que el ruido político comience a tener un mayor impacto en los precios (de los bonos)", manifestó.
Las protestas desafiaron la epidemia de coronavirus en Perú, que reporta unos 937.000 contagiados y unos 35.200 muertos.
Perú, que atraviesa una profunda crisis económica por la pandemia, ha transitado por constantes escándalos de corrupción que han llevado a tres expresidentes a prisión preventiva y otro al suicidio en las últimas dos décadas.
Investigarán a Merino por las 2 muertes
El expresidente de Perú Manuel Merino y el primer ministro, Ántero Flores-Aráoz, serán investigados por la Justicia por homicidio agravado, abuso de autoridad y lesiones graves por la muerte de dos manifestantes y las heridas sufridas por más de un centenar de personas durante protestas callejeras contra la destitución de Martín Vizcarra. También investigarán desapariciones forzadas.