Al menos 34 personas perdieron la vida asfixiadas durante el asalto para robar un casino en Manila, perpetrado por un hombre armado, informaron las autoridades filipinas. El superintendente de la Policía Tomas Apolinario señaló que los fallecidos se encontraban entre la segunda y la octava planta del complejo de ocio Resort World Manila, que alberga un hotel, un cine, un casino y una galería comercial, reporta el diario "Inquirer".
El ataque se produjo en la medianoche del miércoles cuando un hombre con una carabina M4 entró en la segunda planta del complejo y comenzó a quemar mesas de juego con combustible, intentó robar fichas del casino y disparó.
Sumado a las muertes, 54 personas resultaron heridas, algunas de ellas de gravedad, durante la estampida general al escucharse los primeros disparos y por intoxicación de humo, mientras que la Policía confirmó que ninguno fue alcanzado por las balas.
El director General de la Policía, Ronald Dela Rosa, descartó el incidente como acto terrorista y lo calificó de robo, a pesar de que el Estado Islámico (EI) ha reivindicado el asalto. "Si fuese un terrorista, sembraría el terror", declaró.
El cadáver carbonizado del sospechoso fue hallado en la quinta planta del hotel. La Policía asegura que el presunto responsable se atrincheró en la habitación 501, se envolvió en sábanas rociadas de combustible y se prendió fuego a sí mismo, en lo que ha sido catalogado como suicidio.
Conforme a la versión oficial, el móvil del asalto era hacerse con un botín de 130 millones de pesos filipinos (unos 2,6 millones de dólares o 2,3 millones de euros) en fichas del casino.