Donald Trump estaría considerando invocar la Ley de Insurrección, que le permitiría desplegar tropas en distintas ciudades del país para contener las protestas que desde hace días se han desatado en decenas de ciudades por la muerte del afroamericano George Floyd. La información fue publicada este lunes por la cadena NBC News, que cita a cuatro personas familiarizadas con el tema.
Si bien el Gobierno no se expresó hasta el momento sobre esta cuestión, este lunes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, durante una reunión informativa con la prensa, dejó abierta la posibilidad de que se invoque la ley.
“La Ley de Insurrección es una de las herramientas disponibles, si el presidente decide seguir con eso, es su prerrogativa”, manifestó McEnany.
Tom Cotton, senador republicano de Arkansas, instó al presidente a invocar la ley “si es necesario” para que las tropas puedan “apoyar a nuestras fuerzas de seguridad locales y asegurar que esta violencia termine”. “Lo que el presidente puede hacer es decir que se hará justicia de acuerdo con la ley para George Floyd y siempre respetaremos el derecho de protestas pacíficas. Pero los disturbios, la anarquía y el saqueo terminan esta noche. Si la policía local es abrumada, veamos cómo responden estos anarquistas cuando la 101a Divisón Aerotransportada está al otro lado de la calle”, agregó.
En esa línea, algunos de los asistentes de Trump lo han animado en los últimos días a invocar esa ley federal, que tiene 213 años de antigüedad, para contener las protestas y disturbios.
En casos de disturbios civiles, como los que se están registrando en los últimos días tras la muerte de Floyd, los gobernadores norteamericanos pueden solicitar al Gobierno el envío de tropas en servicio activo para colaborar con las fuerzas de seguridad. Sin embargo, hasta el momento ningún gobernador ha hecho esa solicitud.
Según indica NBC, los gobernadores suelen preferir las fuerzas de la Guardia Nacional en estos casos porque pueden desempeñar legalmente funciones policiales, mientras que las tropas en servicio activo no pueden, de acuerdo a una ley de 1878 que prohíbe al Gobierno utilizar las fuerzas militares para actuar como fuerza policial dentro de las fronteras del país. De hecho, miles de miembros de la Guardia Nacional fueron desplegados en varias ciudades del país para frenar los disturbios.
Pero el presidente sí podría invocar la Ley de Insurrección para el despliegue de tropas, sin la solicitud de un gobernador. En ese caso, a esas tropas se les permitiría llevar a cabo misiones de aplicación de la ley.
Para invocar la ley, el presidente norteamericano primero tendría que emitir una proclamación para “ordenar inmediatamente a los insurgentes que se dispersen y se retiren pacíficamente a sus moradas dentro de un tiempo limitado”, según lo estipulado por la ley federal.
De concretarse esa opción, sería la primera que se invoca la ley desde 1992, cuando se aplicó durante los disturbios de Rodney King, en Los Ángeles. En ese entonces la medida fue solicitada por el entonces gobernador de California, Pete Wilson.
Estas versiones sobre la posible invocación de la Ley de Insurrección se da en medio de las críticas de Trump a los gobernadores estatales por su respuesta a los disturbios de los últimos días.
En una conferencia telefónica, cuyo audio se filtró rápidamente y fue difundido por distintos medios locales, Trump dijo a los mandatarios regionales que los manifestantes eran “terroristas” y debían “dominarlos”. De no tomar un enfoque “duro” que implique “enviarlos a prisión por largos períodos de tiempo”, se verían como “idiotas” ante los ojos del público, aseguró.
En concreto, se enfocó en Minnesota, ciudad donde Floyd murió a manos del policía Derek Chauvin luego de que este se arrodillara en su cuello por más de ocho minutos, asegurando que la ciudad se había convertido en un “hazmerreír a lo largo del mundo”.
Más de 4.400 personas han sido arrestadas en el marco de las protestas desde que estas comenzaron la semana pasada.