España cierra hoy un capítulo de su historia impulsado por el jefe de Gobierno, Pedro Sánchez, con el traslado sin honores de los restos del dictador Francisco Franco a un cementerio de Madrid.
Los restos del último dictador europeo serán exhumados de su mausoleo en el Valle de los Caídos y trasladados en helicóptero al cementerio madrileño de El Pardo a las 10,30 de la mañana (5,30 hora argentina).
"Tanto la exhumación como la reinhumación se llevarán a cabo en la intimidad, en presencia de sus allegados", precisó el Ejecutivo. El gobierno del socialista Pedro Sánchez cumplirá así con su iniciativa más simbólica, ya que Franco es el último dictador europeo cuyos restos siguen descansando en un monumento público, donde puede ser enaltecido.
Los restos de Franco serán trasladados hoy a las 5,30 hora argentina.
El traslado del féretro tendrá lugar un día antes de que venza el plazo que se había dado el propio gobierno socialista español para cumplir con su promesa. Sánchez anunció la decisión tras llegar a la presidencia en junio de 2018.
Sin embargo, los nietos del dictador se opusieron y amenazaron con llevar los restos a la catedral de La Almudena, lo que hubiese tirado por tierra la emblemática iniciativa de los socialistas, ya que Franco hubiese pasado a estar en otro lugar público e incluso más accesible para los que pretenden reivindicar su figura.
El pasado 30 de septiembre, el Tribunal Supremo español dio luz verde al gobierno para trasladar los restos. "El gobierno ha defendido desde el principio del proceso que los restos del dictador no podían continuar en un mausoleo público que exaltara su figura", recuerdan en La Moncloa.
Desde su muerte en 1975, Franco yace en una tumba en la Basílica del Valle de los Caídos, un mausoleo situado a unos 50 kilómetros de Madrid que él mismo hizo construir con el trabajo forzoso de presos republicanos para reivindicar el triunfo del bando nacional fascista en la Guerra Civil española (1936-1939). En el lugar yacen los restos de Franco.
Sánchez destacó que con la exhumación de Franco "se cerraba simbólicamente el círculo de la democracia española". Sin embargo, la democracia española no salda completamente su deuda con las víctimas. Más de cuarenta años después del final de la dictadura franquista (1939-1975), la mayoría de los restos de las víctimas que se encuentran enterradas en fosas comunes y en el propio Valle de los Caídos siguen sin identificar.