La Torre Eiffel, símbolo indiscutible de la silueta parisina, cumple hoy sus primeros 120 años sin que ningún otro monumento le haga sombra en la capital francesa desde su inauguración para la Exposición Univesal de 1889.
Inicialmente denominada "Torre de 300 metros", esta estructura de hierro forjado de 324 metros de altura, obra del ingeniero Gustave Eiffel, es uno de los monumentos más visitados del mundo.
La Torre Eiffel fue terminada el 31 de marzo de 1889, cuando su creador ascendió los 1.710 escalones existentes desde la base hasta el tercer piso de la torre y enarboló la bandera francesa.
Eiffel, un ingeniero que construía puentes además de la estructura metálica de la Estatua de la Libertad de Nueva York, supervisó personalmente las obras de la torre, que iba a ser erigida de forma provisional para una exposición internacional que tendría lugar en París semanas después de su inauguración.
El que fue el edificio más elevado del mundo durante más de 40 años, hasta que en 1929 se construyó el Edificio Chrysler en Nueva York, comenzó a edificarse en julio de 1887 en medio de las críticas de quienes lo consideraban como un "deshonor" para París.
Inclusive, la Academia francesa de Bellas Artes, el pintor Ernest Meissonier o el escritor Guy de Maupassant fueron algunos de los grandes detractores de la construcción, a la que llegaron a calificar de "inútil y monstruosa".
Sin embargo, y pese a las críticas de artistas y estudiosos, el público le dio su beneplácito dos años después del inicio de su construcción, en 1889, cuando fue inaugurada.
De los 32 millones de personas que visitaron la Exposición Universal de París, casi dos millones se atrevieron a ascender a las alturas de la torre, símbolo de la era industrial de la época.
En la actualidad, la Torre Eiffel brilla en las noches parisinas con una iluminación especial, en ocasiones con colores adaptados a conmemoraciones nacionales e internacionales, como durante los dos primeros meses de la Presidencia de turno francesa de la Unión Europea (UE).
Ubicada en las cercanías del Río Sena y a un extremo del Campo de Marte, la torre ofrece una vista excepcional que en 2008 pudieron disfrutar sus casi 7 millones de visitantes, un nuevo récord absoluto de visitas.
La Torre Eiffel, conmemora sus 120 años y para la ocasión fue repintada de su color bronce original. Es el punto más alto de todo París y el emblema más popular de toda Francia en el mundo, y sigue sin encontrar quien le haga sombra.
