Una mujer que ingresó a un hospital del sur del estado de Georgia, en los Estados Unidos, para ser tratada por Covid-19, y que luego pasó 40 días en coma con asistencia respiratoria y sufrió un derrame cerebral, despertó de su grave estado tan solo un día antes de la fecha en que los médicos iban a desconectarla.

El hecho, que en el propio hospital definen como "un milagro", se produjo a fines de octubre, y la paciente, notablemente recuperada, abandonó el centro médico el pasado 31 de diciembre, ante la alegría de sus familiares y de los empleados del hospital, que grabaron su salida en un video que se volvió viral.

La historia clínica de Lisa Martin, que es el nombre de esta singular paciente, comenzó el 27 de septiembre de 2020, cuando llegó a la sala de emergencias del Memorial Satilla Hospital, en una pequeña localidad del estado de Georgia.

Entonces, le diagnosticaron coronavirus y tuvo que ser internada. Su estado se complicó y fue conectada casi inmediatamente a un respirador. Luego, fue llevada a un coma inducido, donde sufrió un infarto cerebral del lóbulo frontal.

La página oficial de Facebook del Memorial Satilla Hospital informó que Martin estuvo 59 días conectada a un respirador y 40 días en coma. Cuando ya los médicos decidieron que no había más que hacer, se reunieron con Jeff, el marido de la mujer, y el resto de su familia, y acordaron que en 11 días le quitarían el respirador para dejarla ir.

A miracle to end the year – Lisa Martin goes home

New Year’s Eve has even more significance this year for miracle patient Lisa Martin and her husband, Jeff. Lisa is going home for the first time since Sept. 27 when she was admitted to the Memorial Satilla Health ER with complications from COVID-19. Her amazing journey includes 59 days on a ventilator, 40 days in an induced coma and surviving a frontal lobe stroke. On Oct. 20, Lisa was comatose, her eyes fixed. The hospital called in her family to say goodbye. They decided to give it 11 days before making a decision about removing her from the ventilator that was breathing for her. But God had other plans. On the eleventh day, Lisa broke through the sedatives and began tracking Jeff with her eyes and she moved her hand. After that, she was transferred to two other hospitals (including our sister facility, Memorial Health in Savannah) to progress her care before coming to Memorial Satilla Rehabilitation on Dec. 14 for her final rehabilitation days before going home. We will be sharing a more in-depth version of Lisa’s story. Happy New Year!

Publicada por Memorial Satilla Health en Jueves, 31 de diciembre de 2020

Pero justo el día que se iba a realizar la desconexión, Jeff notó que los ojos de su esposa comenzaron a mirarlo y lo seguían por la habitación. Martin también podía mover su mano. A partir de ese inexplicable momento, la mujer comenzó con su recuperación.

"Tuve que volver a aprender a caminar, hablar, tragar, comer", dijo en una entrevista al medio estadounidense First Coast News.

Luego de su despertar, la paciente fue trasladada a otros dos hospitales de la zona y regresó otra vez al Memorial Satilla el 14 de diciembre para tener sus últimos días de rehabilitación antes de obtener el alta y volver a su casa con su marido y sus cuatro hijos.

Las imágenes de la salida del hospital muestran a una mujer que camina lento, apoyada en un andador, pero entera y feliz, mientras agradece los aplausos de los presentes en el lugar. Luego, se sube al auto y saluda con la mano a la persona que la está grabando y a todos los que la despiden.

"La víspera de Año Nuevo tiene aún más importancia este año para la paciente del milagro", escribieron en la cuenta de Facebook del mencionado centro de salud.

"Tengo que usar oxígeno las 24 horas y caminar con un andador o una silla de ruedas durante largas distancias, pero los médicos creen que debería recuperarme por completo", señaló Lisa Martin al citado medio estadounidense.

La mujer subrayó también que casi no tiene en su memoria gran parte del proceso que vivió desde que empezó con los síntomas de coronavirus hasta la salida del hospital. "Fueron casi tres meses y medio de mi vida, pero es una especie de amnesia. No lo recuerdo", dijo.

La familia de Martin, en tanto, no encuentra explicación a la manera en que se recuperó la mujer, y toma el hecho como un verdadero milagro.