El estado brasileño de Santa Catarina, fronterizo con la provincia de Misiones y muy visitado por turistas argentinos, decretó nuevas medidas de confinamiento, después de haber alcanzado el viernes un récord diario de muertes por causa de la pandemia por el nuevo coronavirus.
En un decreto extraordinario que comenzó a regir desde el pasado sábado, Santa Catarina, que en las últimas horas registró cerca de 59 muertes, impuso nuevas medidas de aislamiento social en 111 de sus 295 municipios, comenzando por la prohibición de circulación de personas en espacios públicos.
Santa Catarina, con una extensión similar a la de Hungría y casi 7,2 millones de habitantes, fue uno de los estados con menos mortalidad y hospitalizaciones graves, a pesar de su nivel de contagios, pero en los últimos días el número de casos y, principalmente, el de fallecidos viene aumentando.
Brasil, con más de dos millones de casos confirmados y 78.000 muertes, viene mostrando reducción de contagios y decesos en algunas ciudades, como Sao Paulo y Río de Janeiro, que se mantienen como epicentro de la pandemia en el país, y en las regiones Norte y Nordeste, que también fueron de las más afectadas. Sin embargo, el desplazamiento del patógeno comenzó a afectar regiones en las que al comienzo se tenía menos incidencia y mortalidad, como la Centro-Oeste y la Sur, refirió la agencia de noticias EFE.
En Santa Catarina se contabilizan 51.549 casos confirmados y 646 muertes, para una tasa de incidencia de 719,5 contagios por cada 100.000 habitantes, mayor que la de sus vecinos Paraná (448,8), estado fronterizo con la Argentina y Paraguay, y Río Grande do Sul (410,6), que limita con Uruguay y también con la Argentina. El índice de mortalidad por cada 100.000 habitantes entre los tres estados de la región Sur sigue siendo menor para Santa Catarina, a pesar del reciente aumento del número de muertes, con una tasa del 9, que es inferior a la de Paraná (11,3) y a la de Río Grande do Sul (10,2).
Con siete de sus seis regiones internas en estado "gravísimo", entre ellas la capital Florianópolis, el Gobierno de Santa Catarina determinó a partir de hoy suspender el transporte intermunicipal y urbano en 111 ciudades y aplazar hasta septiembre el reinicio de las clases escolares.
Otras siete regiones están en estado "grave" y dos más, incluida la que limita con la Argentina, fueron puestas en "alto riesgo".
Con un impacto que era menor al del resto del país, Santa Catarina fue el primer estado en flexibilizar las cuarentenas y las medidas restrictivas y, con excepción de la capital regional Florianópolis, reabrió el 13 de abril el comercio y permitió la mayoría de las actividades económicas. Pero después del aumento de casos y muertes, el gobernador Carlos Moisés, quien acaba de recuperarse de sufrir Covid-19, determinó en junio que los alcaldes tomaran las decisiones locales sobre las cuarentenas y otras medidas de confinamiento.
No obstante, con la curva en alza y un nuevo récord diario de muertes, Moisés determinó el viernes adoptar medidas iguales para los 111 municipios más afectados por la pandemia. Por el momento, las playas de Florianópolis están cerradas.
Por Bolsonaro
Unos 2.000 seguidores del presidente Jair Bolsonaro marcharon por la capital de Brasil, convocados por movimientos evangélicos y para manifestarle su solidaridad al mandatario, que padece coronavirus, mientras las cifras de la pandemia crecen.