El presidente Hugo Chávez dio ayer el puntapié inicial a las celebraciones del Bicentenario de la independencia de Venezuela, después de regresar por sorpresa al país tras una operación por cáncer en Cuba que lo ha obligado a bajar su vertiginoso ritmo. Desde el palacio de Gobierno se dirigió al país en un mensaje televisado previo al desfile militar que abrió los festejos del Bicentenario de la independencia.