El vehículo de exploración científica Curiosity realizó un descenso a través de los cielos rosas de Marte en la madrugada del lunes. Además fue un aterrizaje histórico en un antiguo cráter, iniciando así, una misión de dos años, en busca de evidencia de que el Planeta Rojo alguna vez albergó los ingredientes necesarios para la vida. Este descenso es un paso significativo para lograr el objetivo de enviar astronautas al Planeta Rojo a mediados de la década de 2030, así afirmó el director de la NASA, Charles Bolden.
Los controladores de misión estallaron en aplausos y festejos cuando recibieron señales que confirmaban que el vehículo sobrevivió al descenso de siete minutos. Los ingenieros dijeron que la compleja secuencia de aterrizaje, que combinó un enorme paracaídas con un paquete de cohetes que le permitieron al vehículo bajar sobre la superficie de Marte sostenido por una soga, tenía un margen de error de cero.
‘No puedo creer esto. Es increíble‘, dijo Allen Chen, jefe adjunto de descenso del vehículo y el equipo de aterrizaje en el Jet Propulsion Laboratory.
Poco después, Curiosity envió a la Tierra sus tres primeras imágenes de la superficie de Marte, una de ellas mostrando una rueda del vehículo y su sombra sobre el terreno rocoso.
La NASA fijó el horario oficial de aterrizaje de Curiosity, promocionado como el primer laboratorio científico móvil totalmente equipado enviado a un planeta distante, a las 22:32 hora local (1:32 a.m. GMT). El aterrizaje marcó un éxito bienvenido y un importante hito para la agencia espacial de EE.UU., golpeada por recortes presupuestarios y la reciente cancelación de su programa de transbordadores espaciales, pieza central de la NASA durante 30 años.
El proyecto Curiosity de U$S2.500 millones, formalmente denominado Laboratorio Científico de Marte fue lanzado el 26 de noviembre desde Cabo Cañaveral, en Florida. Esta, es la primera misión astrobiológica de la NASA desde las investigaciones con las naves Viking en la década de 1970. El Laboratorio Científico de Marte va equipado con una serie de sofisticados instrumentos capaces de analizar muestras de suelo, rocas y atmosféricas en el lugar y enviar los resultados a la Tierra. Fuente: Reuters