La plataforma ya estaba instalada, y sólo faltaba la máquina para empezar el plan B para rescatar a los 33 mineros chileno y finalmente arribó ayer la T-130, la recién llegada es la segunda opción de rescate de los mineros y consistente en ensanchar una de las sondas utilizadas para comunicarse con la galería y convertirla en eventual vía de evacuación.

Además de ser una alternativa a la Strata 950 -que excava desde el martes- permitirá avanzar más rápido y realizar el rescate en la mitad del tiempo proyectado inicialmente, es decir en dos meses. Es una perforadora de aire reverso que permite excavar un hoyo de unos 75 cm. de diámetro, avanza alrededor de 20 metros diarios y tiene un alcance de 700 metros de profundidad.

El momento de la llegada provocó escenas de emoción entre los familiares del campamento "La Esperanza", los presentes salieron a recibir los camiones que trasladaron las piezas a los gritos. Con lágrimas en los ojos y la voz quebrada María Segovia, familiar de uno de los mineros, dijo "a esta máquina la llamamos La Milagrosa, le tenemos mucha fe, es la máquina que nos los va a entregar, recuérdelo, esa será la maquina que sacará a los trabajadores". Alicia Campos es más categórica en contestar y hace referencia a la fecha estipulada para el rescate definitivo: "eso es política, pura política, tengo un pálpito de que antes del 18 de septiembre los mineros estarán afuera".

Por su parte el sindicato de La Minera Escondida entregó a los familiares una donación de 676.000 pesos (unos 1.350 dólares), además confirmaron que queda otro plan, pendiente ya que en los próximos días llegará a la mina, situada en la región de Atacama, una máquina petrolera que excavará un tercer agujero como posible ruta de evacuación.

Mientras se espera el funcionamiento de la T-130, la primera máquina continúa trabajando y ya pasó los 45 metros de profundidad.