La Unión Europea aprobó un sistema de permiso previo de viajes, que estaría operativo tras su paso por el Parlamento a partir de 2020.

El sistema en cuestión obligará a los extranjeros que no necesitan visado para ingresar a los países del espacio Schengen, como el caso de la Argentina, a pagar una tasa de 7 euros. El llamado "Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes" (ETIAS, por su sigla en inglés) pretende reforzar la seguridad y la inmigración a la Unión Europea ya que permitirá realizar controles anticipados y, en caso necesario, denegar la autorización de viaje.

Los representantes diplomáticos de los países miembros de la Unión Europea aprobaron la noche del miércoles en Bruselas el nuevo sistema, confirmando de esa manera un acuerdo previo entre los gobiernos y representantes del Parlamento europeo.

 

El sistema pretende reforzar la seguridad y la inmigración.

"Saber qué personas se dirigen a la Unión Europea, antes incluso de que lleguen a la frontera, nos permitirá estar en mejores condiciones de detener a aquellas que puedan plantear una amenaza", dijo en un comunicado el ministro del Interior de Bulgaria, Valentin Radev, cuyo país preside el Consejo de la UE este semestre, según consignó la agencia de noticias Efe.

El sistema se aplicará a los ciudadanos de terceros países exentos de visado, que antes de iniciar su viaje deberán obtener una autorización -que luego servirá durante tres años- a través de una solicitud en línea por la que deberán abonar una tasa de siete euros.

Los datos presentados en cada solicitud se contrastarán automáticamente con las bases de datos de la UE y otras bases de Interpol para determinar si existen motivos que obliguen a denegar la autorización de viaje.

La expedición o denegación de una solicitud que haya provocado una respuesta positiva se efectuará a más tardar 96 horas después de su presentación o, si se ha solicitado información adicional, 96 horas después de la recepción de la misma. Antes del embarque, los transportistas aéreos y marítimos tendrán la obligación de verificar que los extranjeros que necesitan ese permiso estén en posesión de una autorización válida. La autorización de viaje servirá durante tres años o hasta el final de la validez del documento de viaje registrado durante la solicitud, si la fecha fuera anterior. El Reglamento se remitirá ahora al Parlamento europeo para su votación en primera lectura y posteriormente al Consejo para su votación. Télam