Manifestantes y policías han protagonizado este sábado nuevos disturbios en una nueva jornada de protestas en Bogotá, la capital colombiana. Los agentes han cargado y empleado gas lacrimógeno.
Una marcha en las inmediaciones del Parque Nacional de la capital ha terminado en altercados entre manifestantes y efectivos del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía colombiana, según informa el diario ‘El Tiempo’. La prensa colombiana da cuenta de disturbios en otros puntos del centro de Bogotá y de la intervención de policías para dispersar a los participantes: en el parque de los Hippies, plaza Bolívar o Carrera Séptima.
Además se ha informado de al menos dos jóvenes heridos, uno ingresado en la unidad de cuidados intensivos el Hospital San Ignacio con una lesión en la cabeza y en el tórax con pronóstico es reservado y otro gravemente herido durante una intervención del Esmad en la calle 19.
En videos difundidos en redes sociales se observa al segundo muchacho herido y sangrando en el piso de la céntrica Avenida 19 mientras recibe atención médica por parte de miembros de la Cruz Roja y la Defensa Civil. Según versiones de testigos, unos veinte minutos después llegó una ambulancia que trasladó al chico al Hospital San Ignacio. La persona herida tiene unos 25 años de edad y al parecer fue impactada en la cabeza por una bomba aturdidora disparada por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la Policía.
Las protestas comenzaron el pasado jueves coincidiendo con la huelga general convocada por sindicatos, jubilados, profesores y estudiantes, colectivos indígenas y LGTBI, para protestar contra el Gobierno de Duque y sus políticas económicas, las cuales, según denuncian estos colectivos, han depauperado la esperanza de vida en el país.
El deterioro de las pensiones y los salarios, el incumplimiento de los acuerdos con los estudiantes, y la perenne situación de violencia que vive el país -más de 160 dirigentes sociales y sindicales han sido asesinados en lo que va de año-, así como el intento del Gobierno de modificar el acuerdo de paz con las FARC en 2016, son los principales puntos de las movilizaciones.
Los días previos a la huelga, el Ejecutivo otorgó plenos poderes a las autoridades locales y regionales para imponer las medidas necesarias en caso de que se produjeran actos de violencia y revueltas similares a las acontecidas en las últimas semanas en las principales ciudades de algunos de los países de la región, como Ecuador, Chile y Bolivia.
Desde el jueves, día en que comenzaron las manifestaciones contra la política económica y social de Duque, las autoridades colombianas han reportado la muerte de tres personas, dos de ellas en Buenaventura, el principal puerto del país sobre el Pacífico, y otra más en Candelaria, también en el departamento Valle del Cauca (suroeste).
Las protestas de este sábado se iniciaron en el Parque Nacional, donde la policía dispersó con gases lacrimógenos a quienes participaban en un nuevo cacerolazo, que después se dirigieron a la céntrica Plaza de Bolívar, de donde también fueron obligados a retirarse.Después de que el joven herido fue llevado al hospital, los manifestantes rodearon con piedras el lugar en el que cayó y pusieron una tela negra con letras blancas en las que se leía “Con el miedo de mi familia no se juega. Resistencia”.