María Cristina Deambrosi, la argentina herida en el reciente atentado ocurrido en Barcelona, se recupera en España de su lesión en la pelvis mientras se resuelve su traslado al país, que podría concretarse este fin de semana, después de que esa situación provocara un desencuentro entre sus familiares y las autoridades diplomáticas argentinas.
"El día del accidente, el jefe del consulado me dijo que ellos se iban a encargar del traslado de mi mujer cuando estuviera todo preparado. Pero después de cinco días el cónsul, Alejandro Alonso, me dijo que era imposible porque Aerolíneas Argentinas no podía poner una camilla en el avión", afirmó ayer Norberto Ustrell, esposo de la María Cristina, a Radio 10.
Según Ustrell, quien está acompañando a su mujer en el hospital de Bellvitge, en Barcelona, inicialmente las autoridades diplomáticas argentinas le ofrecieron un avión sanitario, luego le dijeron que iban a retirar asientos en la clase económica en Aerolíneas Argentinas para poner una camilla para llevar a su esposa a Buenos Aires, y finalmente desestimaron esa opción, por lo que él recurrió a su seguro, que ahora está gestionando el proceso de traslado.
"Todavía no está todo cerrado al 100%, pero el seguro se va a hacer cargo y me va a llevar de regreso. Ya me dijeron que van a contratar en primera clase para mi mujer, para mí, y la enfermera que viajará con nosotros", explicó Ustrell a Télam.
"En el hospital me dijeron que me podía ir cuando quisiera pero en camilla, ya que la herida que tiene mi mujer en la pelvis se suelda sola, pero con reposo", añadió.
Ustrell destacó que su mujer lleva once días en el hospital y ya se está sentado, de ahí que no tendría problemas para el despegue, por lo que probablemente podremos irnos dentro de poco, quizás el fin de semana".