Los 111 brigadistas argentinos, todos especializados en incendios forestales, que están en Chile para colaborar en el combate del fuego que afecta el centro y el sur del país trabajarán en la zona de Alhué, donde el fuego se extiende en 7.600 hectáreas.
El lugar está en la región Metropolitana, a 84 kilómetros de Santiago, la ciudad capital, en medio de una situación muy complicada por la extensión y la dispersión de las llamas. "Es complicadísima la situación, por la expansión del fuego en un terreno con una geografía y vegetación específica, por eso, los profesionales argentinos que están acá son especialistas en incendios forestales", contó a Télam desde la capital chilena, Martín Torres, coordinador de la misión argentina de Cascos Blancos, el organismo de la Cancillería de ayuda humanitaria.
Mientras cargaban los ómnibus para llegar hasta el lugar designado a los equipos argentinos por las autoridades de la Corporación Nacional Forestal chilena (Conaf), Torres explicó que llegar hasta Alhué "nos demandará, por lo menos, tres horas por el intenso humo que hay en la ruta".
Conaf informó que en la zona de Alhué hay 76 focos activos. El coordinador detalló que ayer llegaron 37 bomberos de Santa Fe y de la Policía Federal con equipamiento específico para combatir incendios, que hoy estarán arribando, por tierra, 61 más desde Córdoba con autobombas y que el lunes próximo se completará el contingente con personal de la Cuarta Brigada Forestal de Parques Nacionales.
La Conaf es el organismo que coordina las tareas y solicitaron, específicamente a Argentina, personal y equipamiento para combatir incendios, y ese fue el criterio que tuvimos para seleccionar a los brigadistas, todos con mucha experiencia. Ayer, los bomberos fueron recibidos por el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz y por el embajador argentino en ese país, José Bordón.