
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró en una conferencia de prensa en Buenos Aires: “Nunca aceptaré la violencia”, al referirse al caos que se desató en París durante las protestas por el precio del combustible, que ya dejaron al menos 80 heridos y más de 180 detenidos.
"Lo ocurrido hoy en París no tiene nada que ver con la expresión pacífica de las protestas", aseguró el mandatario Francés que fue parte del grupo de líderes que se reunieron en la Cumbre del G20.
A la vez, afirmó que, los manifestantes que protagonizan aún incidentes en la capital "no quieren ningún cambio, quieren el caos".
En la capital de su país se vivió durante esta jornada una verdadera batalla campal entre la policía y los manifestantes que tomaron el Arco del Triunfo, y montaron barricadas en varios barrios del centro de París, en la tercer semana de protestas contra el alza de los combustibles y el costo de vida en Francia.
La policía usó hoy gases lacrimógenos y cañones de agua contra cientos de manifestantes que quemaron maderas y hasta hicieron pintadas en uno de los monumentos parisinos más emblemáticos.
Además de los manifestantes, hubo 16 policías heridos en los disturbios, que empezaron cuando los manifestantes quisieron llegar hasta el Arco del Triunfo, el famoso monumento ubicado en uno de los extremos de la avenida de los Campos Elíseos, y fueron reprimidas tras intentar forzar un control policial.
