El Rey Momo abrió ayer el carnaval de Río de Janeiro al recibir en un acto festivo las llaves de la ciudad que hasta el próximo martes bailará al ritmo de la samba para celebrar la fiesta más emblemática del país.
La ceremonia simbólica de la entrega de las llaves de la ciudad se celebra desde 1933, época en la que el soberano, considerado como el "Señor de la alegría", se representaba con un muñeco al que se hacía bailar y desfilar entre la multitud y la fiesta.
El acto, en el que el Rey Momo lució la típica corona y banda, estuvo animado por la orquesta de la escuela de samba Unidos da Tijuca y se celebró bajo una colorida lluvia de pétalos y flores.
Con la fiesta oficialmente abierta y en medio de la fanfarria, el monarca demostró su dominio de la samba y bailó en compañía del alcalde, así como de su exuberante reina, Bianca Ferreira, y de sus dos bellas princesas.