Brasil, 12 de mayo.- El presidente Luiz Lula da Silva bajó de su automóvil oficial para enfrentar un acto de protesta de ciudadanos sin techo, escuchó los reclamos, pidió que le presenten las reivindicaciones en un documento y terminó ovacionado por los manifestantes.
El gesto presidencial se produjo durante una protesta de medio centenar de personas sin techo celebrada a la entrada del Centro Cultural do Banco do Brasil, adonde debía pasar Lula, apuntó un despacho de la agencia Ansa.
Los manifestantes, todos provenientes de las ciudades satélites de Brasilia y los suburbios del Distrito Federal, se concentraban allí ayer a la tarde, cuando la caravana presidencial regresaba tras el almuerzo del presidente en el Palacio de la Alvorada.
Los vehículos oficiales se detuvieron a causa de la protesta, y entonces Lula da Silva dejó el suyo y se acercó a los manifestantes.
Rodeado por las personas sin techo, el presidente escuchó sus reivindicaciones y les pidió que le entregasen un documento sobre el tema. También les solicitó que entregasen una copia del documento a su jefe de gabinete, Gilberto Carvalho.
Las personas sin techo quieren que áreas de la región sean destinadas a la construcción de viviendas populares y no de edificios lujosos. Carvalho recibió el documento y aseguró que buscaría un acuerdo con el gobierno del Distrito Federal.
La conversación entre el presidente y los sin techo duró unos minutos, tras los cuales Lula dejó el lugar ovacionado por los manifestantes.