El socialista François Hollande, que ayer asumió la Presidencia de Francia, llegó a la sede del Gobierno alemán con hora y cuarto de retraso sobre el horario previsto. Es que Hollande se vio obligado a cambiar de avión en París, después de que el aparato en el que emprendió inicialmente viaje fuera alcanzado por un rayo poco después de despegar.
El avión en el que Hollande viajaba ayer a Alemania para entrevistarse con su gobernante, Angela Merkel, tuvo que regresar a París tras ser alcanzado por un rayo en pleno vuelo, a las 17 (12 de Argentina).
El aparato, un Falcon de la Presidencia francesa, aterrizó en el mismo aeródromo del que había despegado minutos antes y Hollande pudo partir con destino a la capital germana en otro avión, agregó un portavoz.
De todos modos, en el primer encuentro entre Hollande y Merkel, los mandatarios asumieron ayer públicamente
sus responsabilidades comunes al expresar su voluntad de trabajar unidos y lanzaron su primer mensaje a Grecia, país que desean permanezca en la zona del euro.
El deseo común de Francia y Alemania ‘es trabajar juntos por el bien de Europa, de manera que llevemos con nosotros a todos los países de Europa‘, dijo Hollande, mientras Merkel señaló que ‘ambos encontraremos en todo caso buenas soluciones‘.
El presidente francés reiteró pese a todo su exigencia de que el pacto fiscal de la Unión Europea se vea enriquecido con medidas para fomentar el crecimiento y demandó que en la cumbre informal de la UE del 23 de mayo se hable incluso de la iniciativa para la creación de los eurobonos, que Merkel rechaza.
