El Boeing 737 Max 8 de Lion Air que se estrelló este lunes frente a las costas de Indonesia con 189 personas a bordo era un avión nuevo.
Modelo 2018, el aparato identificado como JT 610 había empezado a operar con la compañía de bajo costo recién en agosto último. Y acumulaba 800 horas de vuelo, una cantidad escasa en aviación.
Pero ya el domingo, es decir el día anterior a la catástrofe, la aeronave había experimentado "problemas técnicos". Lo reconoció el presidente de Lion Air, Edward Sirait, en rueda de prensa este lunes por la mañana.