San Juan, 23 de julio.- La policía también investiga los posibles vínculos que podrían tener los atentados con cristianos fundamentalistas. En el recuerdo está presente el atentado de 1995 en Oklahoma, en el que murieron 165 personas tras la explosión de una bomba. En aquella ocasión el asesino fue un militar de extrema derecha que además era un extremista católico.

Pero por ahora el único detenido es Anders Behring Brevik, principal acusado de perpetrar los atentados de Oslo. Es descrito como islamófobo, cristiano, conservador y amante de la caza. También es definido como un joven muy educado que vivía con su madre.

Según comenta la televisión noruega, este joven pertenece a un grupo político de extrema derecha. No sólo le relacionan con el tiroteo indiscriminado en el que al menos murieron 84 personas, sino también con la explosión en el centro de Oslo. Algunos testigos, de hecho, lo sitúan en aquella zona antes de que estallara la bomba.

La policía cree que Breivik compró hace unas semanas seis toneladas de fertilizantes. Aunque el presunto asesino tiene una granja, semejante adquisición podía servir para fabricar la bomba que estalló en el centro de Oslo.

Según un testigo citado por la cadena británica Sky News, el tirador llegó a la isla de Utoya en la que se celebraba un acto del partido gobernante laborista y disparó indiscriminadamente a los asistentes a al grito de "debéis morir, debéis morir todos".

El pasado 17 de julio, Anders Behring Breivik escribió en su perfil de Twitter un único mensaje: "Una persona con una creencia equivale a la fuerza de 100.000 que solo tienen intereses".

La policía ahora tiene tres días para interrogar al sospechoso antes de enviarle ante el juez. Él es el único detenido por una matanza que no tiene precedentes en Noruega.

Por ahora el perfil de Facebook del presunto autor de la matanza en la isla de Utoya y de la explosión en Oslo ha sido bloqueado, mientras que su cuenta en Twitter sigue activa.

"Nuestro país jamás había sido afectado por un crimen de esta magnitud desde la Segunda Guerra Mundial", declaró el primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, durante una rueda de prensa, mientras la policía buscaba cadáveres en la isla de Utoeya, donde se celebraba el campamento juvenil.

Según el canal TV2, además de estar vinculado con extremistas de ultraderecha, el sospechoso poseía dos armas registradas a su nombre.Otro medio de comunicación noruego indicó que el individuo se presentaba en su cuenta de Facebook como "conservador", "cristiano", e interesado en la caza y en videojuegos como World of Warcraft y Modern Warfare 2.

Los atentados perpetrados el viernes por la tarde son la mayor matanza en Europa desde los del 11 de marzo de 2004 en Madrid, cuando murieron 191 personas.

El ministro de Justicia, Knut Storberget, dijo que no hay motivos para elevar el nivel de alerta en el país.Sin embargo, se reforzó la seguridad en puntos clave de la ciudad. La policía levantó su consejo a la población de permanecer en casa.Siete de las víctimas murieron en una fuerte explosión que afectó a los edificios del gobierno, incluyendo la oficina del primer ministro Stoltenberg y el ministerio de Finanzas, en el centro de Oslo.

Tras esta explosión, se baraja la hipótesis de que el autor del atentado tomó un transbordador a la cercana isla de Utoeya, vestido con un uniforme de policía.Según los testimonios de jóvenes presentes en el campamento de verano, el sospechoso dijo que estaba investigando la explosión, convocó a los jóvenes a su alrededor y en ese momento abrió fuego con un arma automática.