Con el empate técnico que muestran las encuestas, la clave para ganar las elecciones presidenciales de este martes en EEUU reside en casi una decena de Estados indecisos.
Los expertos coinciden en que la victoria se definirá en Ohio, Colorado, Iowa, Virginia, New Hampshire, Wisconsin, Carolina del Norte, Nevada y, especialmente, Florida, el estado de todos ellos con más votos electorales para dirimir la contienda entre el actual presidente Barack Obama (demócrata), y su rival Mitt Romney (republicano).
En las elecciones del 2000, ganar Florida permitió a George W. Bush llegar a la Casa Blanca, pese a que a nivel nacional obtuvo casi medio millón de votos menos que su rival, Al Gore. En EEUU, cada estado tiene un número preestablecido de representantes (538 en total) según su población, y son éstos los que tras las elecciones, y en función de los votos populares, eligen al presidente y al vicepresidente. El candidato más votado en un estado recibirá el apoyo de todos los representantes estatales (salvo en Nebraska y Maine, que distribuyen el voto electoral proporcionalmente). De ahí que sea importante imponerse en los estados más poblados.
Dado que en la mayoría de los estados se puede anticipar con claridad qué candidato va a ganar, es importante para los rivales políticos vencer en los estados indecisos, especialmente en los de más población. Florida, por ejemplo tiene 29 votos electorales del total de 538.
A una semana de las elecciones, según las últimas proyecciones electorales del diario The New York Times, Obama tendría ya acumulados 237 de los 270 votos electorales necesarios para ganar y Romney 206, mientras que 95 se decidirán en los estados ‘indecisos‘.
Florida tiene este año 29 votos electorales, seguido muy de lejos por Ohio (18), Carolina del Norte (15), Virginia (13), Wisconsin (10), Colorado (9), Iowa (6), Nevada (6) y New Hampshire (4). Esto explica el que las respectivas campañas estén haciendo esfuerzos por conquistar Florida, un estado complicado a nivel electoral que en los últimos meses ha sido visitado en multitud de ocasiones por candidatos y personalidades implicadas.
Si bien es cierto que en Florida hay una gran población latina (22,5 por ciento), que tradicionalmente vota a los demócratas, ésta está compuesta en su mayoría por cubanos (6,5 por ciento), tradicionalmente republicanos, y puertorriqueños (4,5 por ciento), a los que tampoco les afectan las políticas migratorias estadounidenses, en las que Obama cuenta con una baza fundamental.
En las últimas semanas Romney parece haber tomado la delantera en Florida y la mayoría de las encuestas le dan una ventaja cercana a dos puntos porcentuales.
Según encuestas, en Ohio ambos candidatos están empatados, aunque con una ligera ventaja del actual mandatario. Según las últimas encuestas difundidas, Romney se haría con la victoria en Colorado, Florida, New Hampshire, Carolina del Norte y Virginia. Son 70 votos electorales en total, con lo que se impondría en los estados indecisos a Obama, que sólo lograría los 40 votos que aportan Iowa, Nevada, Ohio y Wisconsin.
