La Organización Mundial de la Salud (OMS) realizará un encuentro el 27 de enero con diferentes especialistas con el objetivo de evaluar si la pandemia del Covid-19 dejó de ser una emergencia de salud pública internacional. En este contexto, el comité que asesora al director general, el Doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, esgrimirá sus argumentos en contra o a favor de finalizar con el concepto de pandemia.
La reunión había sido pactada para octubre de 2022, pero fue postergada por la aparición de nuevas variantes que afectaron a la población mundial.
A pesar de los números y las preocupaciones en China, país donde se originó el virus, el Comité de Emergencia bajo el Reglamento Sanitario Internacional (RSI) sobre la pandemia de covid-19 analizará el tipo de impacto que tiene actualmente la enfermedad en la población y en los sistemas sanitarios.
El organismo, conformado por 17 especialistas, es dirigido por Didier Houssin, profesor de cirugía y especialista en trasplantes de la Universidad de París-Descartes y asesor en seguridad sanitaria de la OMS.
El 30 de enero se cumplirán tres años desde que Houssin, acompañado por Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció el brote de un nuevo coronavirus en China, lo que significa una emergencia de salud pública de preocupación internacional, un mes y medio antes de calificar a la situación como una pandemia.
El director de la OMS fue optimista con el escenario de la pandemia a nivel mundial: “No hay duda de que, globalmente, estamos en una situación significativamente mejor que hace un año".
Además, hizo referencia a la cantidad de muertes, la cual se estancó entre 10.000 y 14.000 decesos semanales desde mediados de septiembre: “El mundo no puede aceptar esa cantidad de muertes cuando contamos con las herramientas para prevenirlas. La semana pasada se notificaron a la OMS casi 11.500 muertes: el 40% de América, el 30% de Europa y el 30% de la región del Pacífico occidental. Pero, seguramente, esa cifra es una subestimación, dada la subnotificación de muertes por Covid en China.”
Uno de los países más perjudicados sigue siendo China, quien reportó este sábado casi 60.000 muertes relacionadas con el covid-19 en poco más de un mes, la primera cifra importante de fallecidos publicada por el gobierno desde que flexibilizó en diciembre sus estrictas medidas sanitarias.
El presidente chino, Xi Jinping, afirmó que está "preocupado" por la situación del covid-19 en las áreas rurales de China, según informó la prensa estatal, en momentos que millones de personas viajan al campo por el feriado del Año Nuevo Lunar. El gobernante también defendió su política de cero covid, levantada en diciembre tras golpear la economía y motivar protestas en todo el país, y sostuvo que había sido "la decisión correcta".