El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, logró zafar del pedido de destitución en su contra con una votación parlamentaria que exhibió una fractura en el fujimorismo, su principal adversario interno.
Después de que el pleno del Congreso rechazó despojarlo el jueves por la noche por un caso de corrupción, Kuczynski aseguró que “empieza un nuevo capítulo. “Reconciliación y reconstrucción”, escribió en su cuenta de Twitter. Tras la sesión, la moción con el pedido de destitución obtuvo 79 votos a favor, cuando la ley indica que necesitaba del apoyo mínimo de 87 de los 130 legisladores. Desempeñaron un papel decisivo los legisladores del bloque Nuevo Perú, que se retiraron antes de la votación. También se produjo la abstención de 10 legisladores del partido fujimorista Fuerza Popular (FP). Entre los legisladores de FP que se abstuvieron estuvo Kenji Fujimori, hijo del encarcelado expresidente Alberto Fujimori. Kuczynski negó haber favorecido a la constructora Odebrecht.