En medio del más absoluto hermetismo, el gobierno argentino se disponía anoche, al cierre de esta edición, a presentar la oferta de reapertura de canje de deuda a la Corte de Apelaciones de EEUU en la causa contra los denominados ‘fondos buitre’. A su vez, comenzó con el proceso de ejecución del pago de un nuevo vencimiento de deuda a los bonistas que ingresaron al canje.
Los abogados que representan al país ante el tribunal podían hacer uso del plazo fijado por la Corte para enviar la propuesta hasta las 2 de la madrugada del sábado en Argentina (las 24 en Nueva York).
El texto argentino, que fue analizado por la presidenta Cristina Fernández, será enviado a través de internet por el estudio Cleary Gottlieb, con lo que quedará habilitado el ingreso de la oferta al sistema legal Federal de Nueva York.
En el ínterin, el Gobierno continuó con el cumplimiento de sus obligaciones y ejecutó un nuevo pago -correspondiente a los bonistas que ingresaron a los canjes 2005 y 2010-, por un monto de 250 millones de dólares que vencen el 31 de marzo.
Como se realizó en todos los casos hasta el momento, el pago a los inversores se realizó vía Bank of New York (BONY).
Los tenedores locales tendrán acreditada en su cuenta el pago el próximo día hábil -miércoles 3 de abril por el feriado puente del lunes y martes del Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas-, mientras que el resto de los inversores contarán con los fondos el primer días del nuevo mes.
La presentación de la propuesta de pago a los holdouts responde al pedido que los jueces de ese mismo tribunal estadounidense le hicieron al país el 29 de febrero último.
Las opciones en danza
En las últimas horas, los matutinos porteños especularon con que el Gobierno evaluaría saldar la deuda con un bono par, esto es, reconocer el 100% de la deuda, y pagar en un plazo de 30 años y un interés de 2% anual. De ese modo, argumentará Argentina, no estaría infringiendo la ley como sostuvo el juez Thomas Griesa (la Argentina violó la cláusula de tratamiento igualitario y pagó a los bonistas que entraron al canje pero no los buitres).
Otra versión cuenta que el país entregaría un bono discount, el cupón PBI y un global 2017 (por los intereses). Sin embargo, la opción que trascendió con más firmeza en las últimas horas sería un mix de las dos anteriores: entregar un bono par por el capital (US$ 450 millones) y un discount por los intereses (US$ 850 millones) con una tasa de 8,28% anual. (DyN, Télam).