El colosal huracán Irma, una de las tormentas más poderosas que ha azotado al Atlántico en un siglo, avanzaba anoche sobre Puerto Rico tras golpear a varias islas pequeñas del Caribe con una combinación catastrófica de fuertes vientos, oleaje y lluvia.
Al menos cuatro personas murieron en cuatro islas diferentes debido al paso de Irma, que meteorólogos han descrito como un huracán "potencialmente catastrófico" de categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson de intensidad de huracanes.
Una persona falleció en Barbuda, la isla más septentrional de Antigua y Barbuda, un surfista murió en Barbados y el gobierno francés informó de dos difuntos en los territorios caribeños de ultramar de San Martín y San Bartolomé.
El ojo de Irma, una tormenta de categoría 5 con vientos de 300 km por hora pasó el miércoles sobre la parte norte de las Islas Vírgenes y podría llegar el sábado o domingo a Florida, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH), que tiene su sede en Miami.
Irma puede convertirse en el segundo ciclón de gran magnitud en golpear al territorio continental de EEUU en semanas tras el paso del devastador huracán Harvey, pero su trayectoria precisa sigue siendo incierta.
El ojo de Irma pasaba justo al norte de Puerto Rico y golpeaba a San Juan, la capital del territorio estadounidense, con abundantes lluvias y fuertes vientos que provocaron la caída de árboles sobre carreteras. También resultó muy golpeado el Aeropuerto Internacional Princesa Juliana de la isla portorriqueña de San Martín. El tercer aeródromo con mayor número de pasajeros del Caribe, resultó devastado por el paso del huracán Irma.
Medios regionales, apoyados por material gráfico, reportaron los graves daños sufridos por la infraestructura, con pasarelas de embarque destrozadas y una pista inutilizada por la acumulación de
desperdicios, arena y agua, entre otros desperfectos.
República Dominicana y Haití intensificaron anoche los preparativos ante la amenaza del huracán.
Pese a Irma, el Papa ya está en Colombia
El papa Francisco se dio ayer su primer baño de multitudes en Colombia en el recorrido de 15 km entre el aeropuerto militar de Catam, en Bogotá, y la Nunciatura Apostólica, donde pernoctará las cuatro noches que esté en el país. Nada más emprender el recorrido, Francisco saludó sonriente desde
el papamóvil al llegar después de un vuelo que estuvo en duda por el paso del huracán Irma. Hasta rezó una oración el Papa de por medio. El vehículo blanco que transportaba a Francisco tomó la Avenida el Dorado, que comunica al aeropuerto con el centro de la ciudad, donde miles de personas lo saludaban con gritos, banderas y pañuelos blancos, y los más entusiastas corrían algunos metros detrás de la caravana para no perderse el momento.