El pasado jueves, cerca de 1.000 personas protestaron afuera del Palacio de Gobierno de Guadalajara, en el estado mexicano de Jalisco, para exigir justicia tras la muerte de Alejandro Giovanni López, quien falleció hace un mes después de haber sido brutalmente golpeado por la policía durante su detención.

Con la consigna "Giovanni, no murió, el Estado, lo mató", miles de jóvenes protestaron por la muerte del hombre de 30 años, presuntamente ocurrida a manos de la Policía municipal de lxtlahuacán de los Membrillos.

Portando pancartas y gritando "La policía no me cuida, me asesina", los manifestantes denunciaron la brutalidad policiaca con la que Giovanni fue detenido el pasado 4 de mayo, presuntamente por no usar mascarilla de protección en medio de la emergencia por el coronavirus.

Al llegar al Palacio de Gobierno, dos patrullas policiales fueron incendiadas por los manifestantes. 

Según reportes de redes sociales, cuando los manifestantes llegaron al Palacio de Gobierno, les lanzaron botellas y latas. En un video difundido en Twitter, se observa a un elemento de la Policía que buscaba arrojar gas lacrimógeno a los jóvenes, pero fue detenido por sus compañeros. 

Reacciones

Con la etiqueta #JusticiaParaGiovanni, cientos de personas denunciaron la detención arbitraria y posterior ejecución extrajudicial del joven. 

Medios locales informaron que Giovanni fue detenido el 4 de mayo por no llevar el cubrebocas en la vía pública. En un video que circula en las redes, se observa al albañil forcejeando con varios policías que intentan introducirlo en el vehículo y, finalmente, se lo llevan detenido. 

La familia de Giovanni relató que tras la detención, acudieron a la Policía Municipal de lxtlahuacán para buscarlo, pero ahí les comunicaron que había sido trasladado al Hospital Civil, en donde falleció por traumatismo craneoencefálico. 


Tras la crítica por la muerte de Giovanni y la creciente presión en redes sociales, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, tildó de "una atrocidad" lo sucedido. 

"Vamos con todo el peso de la ley contra quien resulte responsable para que este no sea un caso más de impunidad", tuiteó Alfaro, quien aseguró que policías estatales no participaron en los hechos.

"Estamos investigando por qué lo mataron y quién lo mató. Eso es lo más importante. No puede haber ninguna causa que justifique este brutal hecho", agregó.

Tras la indignación generada por la muerte de Giovanni, la Secretaría de Gobernación (Segob) emitió un comunicado condenando los presuntos abusos por parte de las autoridades.


"El hecho se da en el contexto de las medidas restrictivas implementadas por el gobernador de Jalisco para hacer frente a la pandemia, que incluyen el uso de la fuerza pública y que llevó a la comisión de abusos por parte de la autoridad", señaló la Segob.  

La dependencia solicitó las carpetas de investigación por el probable uso excesivo de la fuerza pública tanto en el caso de Giovanni, como en otro incidente ocurrido el pasado 28 de febrero en Tijuana, en el estado de Baja California, en donde una persona en situación de calle falleció después de haber estado en custodia de la policía municipal.