El ex presidente cubano Fidel Castro apareció en público de uniforme para releer un discurso pronunciado hace medio siglo en el inicio de su guerra ideológica sin cuartel con Estados Unidos.
Castro, de 84 años, repitió casi textualmente un discurso del
28 de septiembre de 1960 donde anunció la creación de los Comités de Defensa de la Revolución, unas células de vigilancia barrial para prevenir sabotajes contra el sistema socialista que empezaba a construir en las narices de Estados Unidos.
‘Compatriotas, con el recuerdo de todos los caídos en defensa
de nuestra revolución y sus justas ideas (…) no vacilo en
proclamar que hemos cumplido‘, dijo.
Unos 20.000 simpatizantes participaron desde temprano en la
recreación del mitin ante el palacio de Fulgencio Batista, un
dictador apoyado por Estados Unidos al que Castro derrocó con su
revolución de 1959.
Y para muchos de ellos el mensaje de Castro fue claro.
‘Es un discurso de gran importancia histórica porque nuestro
enemigo sigue siendo el mismo que hace medio siglo‘, dijo María
Rosa Fernández, vistiendo el uniforme de la telefónica estatal.
Casi dos décadas después del fin de la Guerra Fría, Cuba y
Estados Unidos aún no tienen relaciones diplomáticas plenas.
Pese a un tímido acercamiento tras la elección del presidente
Barack Obama, Cuba sostiene que Estados Unidos no ha renunciado a su objetivo de forzar un cambio de régimen en la isla.
Al terminar de releer su discurso de unos 40 minutos, Castro
habló por media hora más sobre su teoría de una inminente guerra
nuclear si, como él cree, Estados Unidos ataca a Irán.
El veterano líder cubano aludió a su reciente encuentro con
una sobreviviente de la explosión de una bomba nuclear lanzada
por Estados Unidos en Hiroshima en 1945.
Castro leyó también la justificación del entonces presidente
estadounidense Harry Truman para bombardear la ciudad japonesa al final de la II Guerra Mundial.
‘Ahí ven el esqueleto, el alma de un imperialista‘, indicó,
agregando que Truman ‘debe estar en algún lugar del infierno‘.
‘El mundo tiene que saber, se tiene que conocer, porque hoy
si ustedes ven las teorías que tienen, los planes que tienen y
las doctrinas militares que tienen, realmente se quedan fríos‘,
añadió.
Castro, apartado del poder desde que enfermó a mediados del
2006, interrumpió en julio su convalecencia para advertir sobre
el peligro inminente de una hecatombe nuclear.
El veterano Comandante se mantiene al margen de la política
doméstica, en manos de su hermano menor y sucesor, Raúl Castro,
embarcado en una reestructuración del sistema socialista que
contempla la ampliación del sector privado.
El escenario del segundo acto de masas de Fidel Castro en el
último mes fue muy simbólico.
Castro habló junto a un cañón con el que, cuentan, hundió un
barco estadounidense durante la fallida invasión organizada por
la CIA en Playa Girón en 1961.
