Estados Unidos ordenó hoy la salida de 15 funcionarios de la embajada cubana en Washington, en respuesta a los supuestos “ataques” acústicos que han sufrido al menos 22 de los diplomáticos estadounidenses en Cuba, y que han llevado al Departamento de Estado a reducir su personal en la isla caribeña.
 

“La decisión se tomó por el fracaso de Cuba para proporcionar la protección estipulada en la Convención de Viena a nuestros diplomáticos”, afirma el departamento de Estado en su comunicado.
 

 

El Departamento de Estado ha proporcionado al Gobierno cubano “una lista” de funcionarios que deben salir del país en un plazo de siete días, explicó a periodistas un funcionario del Departamento de Estado, quien informó de que la cifra de estadounidenses afectados por los misteriosos ataques se ha elevado de 21 a 22.
 

El comunicado afirma que EEUU “mantiene sus relaciones diplomáticas con Cuba y seguirá cooperando” con las autoridades cubanas “en la investigación sobre los ataques” a los diplomáticos estadounidenses.
 

 

EEUU elevó hoy a 22 la cifra de funcionarios estadounidenses que han experimentado síntomas como “problemas en el oído y pérdida de audición, mareos, dolores de cabeza, fatiga, problemas cognitivos y dificultad para dormir” debido a los incidentes.
 

El Departamento de Estado sigue investigando los sucesos, que comenzaron a registrarse a finales de 2016 y cuyo último episodio confirmado tuvo lugar este agosto pasado.

El Gobierno cubano ha negado toda relación con los ataques, que está investigando, y ha tachado de “precipitada” la decisión de Washington de retirar a sus diplomáticos y aconsejar a todos los estadounidenses que no viajen a la isla.