Luego de ser protagonista de una batalla legal, familiar y política por su custodia, el balserito que emigró ilegalmente de Cuba hacia EEUU ahora es un adolescente que estudia en la escuela militar Camilo Cienfuegos, donde se prepara como futuro oficial de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.

Desde que regresó a Cuba hace diez años, Elián González se convirtió en un militante de la juventud comunista, amante de la música, de la computación y del gimnasio. En la actualidad, el adolescente de 16 años "disfruta la música, es fiestero, aunque no muy buen bailador, pasa horas frente al ordenador o haciendo \’hierros\’ (pesas) con sus amigos" reseñó el periódico Tribuna de La Habana, en su edición dominical.

En noviembre de 1999, Elián González sobrevivió milagrosamente al naufragio de una embarcación de emigrantes ilegales en el que murió su madre, Elizabeth Brotons, y otras diez personas cuando intentaban alcanzar las costas de la Florida (EEUU).

Tras haber permanecido en altamar amarrado a una goma de auto durante dos días, dos pescadores lo encontraron "vivo y salvo, protegido por delfines", según contaron. Los pescadores que rescataron al balserito de seis años entregaron al pequeño a unos parientes paternos lejanos de Miami en custodia temporal, que luego se negaron a devolverlo a su padre, lo que desató una complicada disputa legal, política y un drama familiar. Juan Miguel González, padre de Elián, reclamaba la custodia de su hijo, lo que dio pie al inicio de la batalla legal que se prolongó durante nueve meses.

La comunidad cubano-americana lo recibió en Miami (Florida) como a un niño milagroso y lo transformó en el héroe del exilio. Fue así como su caso comenzó a politizarse tanto en Estados Unidos como en Cuba. El tío abuelo de Elián, Lázaro González, y su prima Maryslesis prácticamente lo secuestraron, desencadenando una feroz ofensiva contra el gobierno de EEUU para lograr que el pequeño no regresara a Cuba, donde su padre lo reclamaba con el apoyo de Fidel Castro.

El líder y ex presidente cubano Fidel Castro fue un activo promotor de la campaña en favor del regreso del niño náufrago y encabezó muchas de las protestas y tribunas abiertas convocadas entonces en la isla para reclamar su retorno.

El padre de Elián recobró finalmente la patria potestad, después de que las autoridades estadounidenses se vieran obligadas a usar la fuerza para arrebatar al niño de sus parientes en Miami.

El Gobierno cubano consideró la devolución de Elián una victoria política frente al sector más radical del exilio anticastrista residente en Florida. El caso dio lugar a que por primera vez Castro y el ex presidente de EEUU, Bill Clinton, estuvieran totalmente de acuerdo en un punto: Elián debía regresar a Cuba.

Elián cambió de esa manera la dinámica política entre La Habana, Washington y Miami y su caso desprestigió al exilio. La mayoría del pueblo estadounidense condenó la manera en que Miami transgredió leyes reteniendo al menor. Nadie olvida la manera en que los agentes federales ingresaron con armas a la casa de los González porque la familia se negaba a entregarlo voluntariamente.

Elián volvió a Cuba el 28 de junio de 2000, en contra de los deseos de su tío abuelo, con quien permaneció hasta que fue "recuperado" por un equipo táctico de la Policía estadounidense. El menor, que contaba entonces con seis años de edad, fue enviado por las autoridades estadounidenses a Cuba a petición de su padre, Juan Miguel González.