La primera noche tras el diagnóstico positivo de Covid-19 el presidente de EEUU, Joe Biden, tuvo leves picos de fiebre de hasta 37,5 grados pero seguía cansado, con goteo nasal y tos ocasional. Frente a este cuadro la Casa Blanca informó ayer que el mandatario de 79 años iba a seguir trabajando aislado desde su despacho y que se cancelaban todos los compromisos agendados previamente, entre ellos, la cumbre que iba a mantener con el presidente Alberto Fernández el próximo martes 26 de julio en Washington.
Las fuentes oficiales argentinas aclararon ayer que aunque la cumbre quedó postergada sin fecha, ‘no se cancelaron las reuniones preparatorias ni las avanzadas de ceremonial y seguridad’ para la realización de la bilateral e informaron que ambas partes están acordando una nueva fecha ‘a la brevedad’.
El encuentro con Biden cobró mucha fuerza en esta semana para el presidente Alberto Fernández ya que implicaba un envión político muy importante en medio de la peor crisis financiera que enfrenta un gobierno peronista. Además, Alberto buscará cuando se concrete el primer cara a cara con Biden, apoyo para seguir negociando algunas correcciones a las metas acordadas con el FMI tras la refinanciación de la deuda.
La Casa Blanca informó ayer que Biden contrajo Covid-19 con ‘síntomas muy leves’, explicó su vocera, Karine Jean-Pierre, en un comunicado. El presidente demócrata estaba tomando Paxlovid, la pastilla anticovid de Pfizer, prosiguió el texto, sin estimar cuánto tiempo podría estar aislado, Biden está totalmente vacunado y recibió dos dosis de refuerzo, y ‘seguirá asumiendo todas sus funciones’ durante este tiempo, agregó.
La enfermedad obligó a cancelar un viaje a Pensilvania en el que Biden pretendía exponer sus planes para pedir al Congreso 37.000 millones de dólares para programas de prevención del crimen.
‘Amigos, estoy muy bien. Gracias por su preocupación. Acabo de llamar al senador Casey, al congresista Cartwright y al alcalde Cognetti para enviarles mis disculpas por haber faltado a nuestro evento. Me mantengo ocupado’, dijo Biden en Twitter. Una foto que acompañaba al tuit mostraba al presidente sonriendo, sentado ante un escritorio con papeles.
Aunque muchos estadounidenses han dejado atrás las estrictas precauciones de los primeros meses de la pandemia, volviendo a las oficinas y las escuelas y reanudando los viajes de verano, el virus sigue propagándose. Los casos en Estados Unidos han aumentado más de un 25% en el último mes un, según los datos de los CDC, a medida que la subvariante BA.5, de rápida propagación, se ha ido afianzando.