Asaltos, secuestros, toma de rehenes en un canal de televisión, ataques varios, saqueos y máxima tensión en las calles. Así se vivió ayer una violenta jornada en Ecuador que obligó al gobierno del presidente Daniel Noboa declarar un estado de "conflicto armado interno" y movilizar a las Fuerzas Armadas para frenar a una veintena de bandas criminales vinculadas al terrorismo y narcotráfico que aterrorizan el país desde hace más de un año. En este crítico escenario, el Gobierno también decidió la suspensión de las clases en todos los niveles por lo que resta de la semana.

El ataque que precipitó la reacción de gobierno se dio en un canal de TV de Guayaquil cuando hombres encapuchados tomaron la sede de TC mientras se oían disparos y gritos. Algunos de los atacantes hicieron gestos a la cámara y se escuchó a alguien gritar ‘no policía’, antes de que la transmisión fuera cortada.

Posteriormente se pudo ver a algunos de los delincuentes saliendo del estudio con parte del personal, mientras que otro canal mostró imágenes de policías afuera de la sede del canal. La propia Policía Nacional informó en redes sociales que sus unidades especializadas intervinieron y comenzaron a evacuar al personal de la cadena de televisión y detuvieron a varios de los atacantes.

Noboa, exlegislador e hijo de uno de los hombres más ricos del país, asumió el cargo en noviembre con la promesa de arreglar la atribulada economía y detener una ola de violencia en las calles y en las prisiones que ha estado creciendo en los últimos años.

En un decreto publicado ayer, Noboa dijo que reconocía la existencia de un ‘conflicto armado interno’ en Ecuador e identificaba a varias bandas criminales como ‘organizaciones terroristas’, entre ellos Los Choneros. El decreto también ordenaba a las Fuerzas Armadas ‘neutralizar’ a los grupos.

El joven mandatario había declarado el lunes el estado de excepción de 60 días -una herramienta usada por su predecesor con poco éxito-, permitiendo patrullas militares, incluso en las prisiones, y estableciendo un toque de queda nocturno a nivel nacional.

La medida fue una respuesta a la fuga de Adolfo Macías, líder de la banda criminal Los Choneros, del penal donde cumplía una condena de 34 años, e incidentes de seguridad en varias cárceles, incluyendo el secuestro y la retención de guardias penitenciarios por parte de los presos.

Según el reporte de la policía ayer hubo ataques en una universidad y explosiones en las provincias de Esmeraldas y Los Ríos, mientras que la alcaldía de la ciudad de Cuenca confirmó otra y la Fiscalía General dijo que investigaba una en Guayaquil. Los medios locales también han informado de explosiones en Loja y Machala. Las autoridades no han dado una causa de ninguna de las explosiones pero el país es un polvorín.

Noboa planea realizar una consulta popular centrada en los esfuerzos de seguridad y el combate al crimen.