Marchas, pancartas y gritos de justicia; altercados, disparos, gases lacrimógenos, incendios y saqueos de locales son algunos de los hechos que se produjeron en Minneapolis como respuesta a la muerte de George Floyd, un ciudadano afroamericano que fue asfixiado por un policía en medio de la calle el pasado lunes.
Un video publicado después de la muerte de Floyd lo mostraba con dificultades para respirar en el piso mientras un policía blanco le presionaba el cuello con la rodilla.
Las manifestaciones que dieron paso a los disturbios en Minneapolis, y que obligaron al gobierno estatal a desplegar la Guardia Nacional, se extendieron a otros estados y cientos de personas salieron a las calles en California, Chicago, Memphis. Nueva York, Oakland, Ohio y Colorado.
Gran parte del peor daño se concentró alrededor de la estación del Departamento de Policía de Minneapolis donde se cree que trabajaban los oficiales involucrados en la muerte de Floyd, de 46 años.
Como consecuencia de las situaciones que se están viviendo en la mencionada ciudad, el presidente norteamericano publicó un controvertido tuit: "Cuando empiecen los saqueos empezarán los disparos". Fue la misma red social la que ocultó casi inmediatamente el comentario presidencial por violar su política de no hacer "apología de la violencia".