Una estudiante de medicina de Yemen (país vecino a Arabia Saudita), fue detenida ayer en Saná, capital yemení, como sospechosa de haber enviado a EEUU dos paquetes con explosivos, que fueron localizados el viernes.
Los explosivos fueron encontrados, uno en el aeropuerto británico de East Midlands (centro de Inglaterra), y el segundo en Dubái, en Emiratos Árbes Unidos, en un contenedor de la compañía de mensajería FedEx, y ambos paquetes tenían como destino dos sinagogas de Chicago en EEUU.
La joven, cuya identidad no ha sido facilitada, fue detenida junto a su madre, pero no se informó de si la madre de la joven puede tener algún tipo de responsabilidad en el envío de los paquetes explosivos escondidos en dos aviones que se dirigían a EEUU desde Yemen.
Las detenciones fueron practicadas al registrar los agentes de seguridad la vivienda, poco después de que el presidente yemení, Ali Abdalá Saleh, convocara a la prensa para anunciar que la casa de la mujer estaba totalmente rodeada.
El gobernante, que tampoco quiso revelar la identidad de la sospechosa, dijo que la policía yemení había llegado a ella gracias a la información proporcionada por los servicios de inteligencia de EEUU.
Al parecer, la joven fue identificada gracias a la tarjeta "sim" de un teléfono móvil hallado en el paquete interceptado en el Reino Unido, y se cree que Al Qaeda en la Península Arábiga, que opera desde Yemen, está detrás de esta operación.
En su breve comparecencia ante los periodistas, el presidente yemení, que no aceptó preguntas, confirmó que la joven que poco después, de la conferencia, fue detenida fue la que envió los paquetes a EEUU y cubrió los gastos de envío.
Saleh aprovechó para insistir en que su Gobierno rechaza cualquier interferencia extranjera en su lucha contra Al Qaeda en la Península Arábiga, que tiene en Yemen uno de sus principales bastiones y donde cuenta con campos de entrenamiento.
"No queremos que interfieran en los asuntos de Yemen y en nuestra persecución de Al Qaeda", insistió Saleh.
El gobernante, en sus declaraciones, agradeció la colaboración recibida desde otros países en este caso, tanto de EEUU y del Reino Unido como de Arabia Saudita, que tiene gran experiencia en la lucha contra Al Qaeda.
"Seguiremos a la caza de Al Qaeda donde quieran que estén", afirmó Saleh.
Por su parte EEUU afirmó ayer que los paquetes detectados estaban diseñados "para perpetrar algún tipo de atentado", aunque también se puede tratar de un "ensayo" para probar posibles fallas de seguridad de los servicios internacionales de mensajería.
En tanto el viernes en la tarde, el presidente de EEUU, Barack Obama, dijo que "Al Qaeda continúa planeando atentados terroristas contra nuestro país". A su vez, el gobierno británico señaló que uno de los bultos encontrados "tenía viabilidad" para una eventual detonación, sostuvo la ministra de Interior británica, Theresa May, en referencia al paquete ubicado en el aeropuerto de East Midlands.

