La opositora Michelle Bachelet, de la coalición de centroizquierda Nueva Mayoría, se consagró como la nueva presidenta de Chile al imponerse por más de 24 puntos porcentuales a la oficialista Evelyn Matthei en el balotaje de ayer.
Con el 99,85 % de las 41.349 mesas escrutadas, la expresidenta Bachelet obtenía un 62,15 % de los votos frente al 37,84 % de Mattei. Una vez conocido el resultado, el presidente Sebastián Piñera llamó por teléfono a la ganadora para felicitarla, comunicación que se pudo ver y escuchar por televisión. La exmandataria, que gobernó Chile entre 2006 y 2010, agradeció el saludo e invitó al presidente a que la visite hoy a su domicilio, y Piñera aceptó.
‘Ella ganó y la felicito‘, dijo por su parte Matthei, la candidata presidencial por el oficialismo y por la derecha. Matthei se declaró la ‘única responsable‘ por no haber podido revertir la amplia tendencia favorable que Bachelet traía de la primera vuelta del último 15 de noviembre, cuando había quedado al borde del 47 por ciento de los votos frente a 25 de Matthei.
En las primeras horas posteriores al cierre de los comicios, llegaron al comando bachelletista los principales dirigentes de los partidos que integran Nueva Mayoría. También se hicieron presentes el embajador argentino, Ginés González García; Rafael Follonier, en representación de la Cancillería argentina, Aníbal Ibarra y Hermes Binner.
Ante una multitud que vitoreaba su triunfo frente a un céntrico hotel de Santiago, Bachelet agradeció ‘por hacer que esta ciudadana, igual a ustedes, sea hoy una presidenta tan afortunada. Hoy abrimos una nueva etapa. Debemos marcar un nuevo destino‘.
Para esta segunda vuelta electoral, que ayer tuvo un 59 % de abstención de los ciudadanos, Bachelet llevó como principales banderas de campaña propuestas de reformas en la educación, los impuestos y la Constitución. Si bien tendrá mayoría simple en el Congreso durante su mandato (2014-2018), para algunas de estas enmiendas deberá negociar con la oposición dado que se trata de medidas que reclaman mayoría especial.
El escenario que se le anticipa no es del todo favorable. El crecimiento de la economía está entrando ya en un ciclo menos dinámico, producto de la baja en el precio del cobre, la principal exportación. El Banco Central ha recortado sus proyecciones de expansión de la economía para el próximo año a un 4,2 %, bastante por debajo del promedio de en torno al 5,5 % registrado en el último cuatrienio. Las arcas fiscales tampoco estarán rebosantes, ya que el presupuesto público aprobado para el 2014 es más bajo que el de años anteriores. El control de la inflación se impone como otro tema urgente, junto a la superación de la pobreza.

