La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, viajó ayer al Norte del país para evaluar en terreno los daños causados por aluviones que dejaron víctimas y cuantiosos daños materiales causados por un temporal que a nivel nacional suma seis muertos y un desaparecido.
“Alguna gente ha perdido todos sus enseres, otra gente ha tenido situaciones muy complejas”, dijo la mandataria en la ciudad de
Tocopilla, una de más afectadas, adonde se trasladó para visitar a los damnificados y disponer medidas para enfrentar la situación.
El temporal de lluvia y viento, comenzó hace cuatro días, afectó a una decena de regiones, en una extensión de 2.600 kilómetros desde la sureña región hasta el extremo Norte y dejó 934 damnificados, 830 de los cuales tuvieron que ser evacuados de sus casas.
La mitad de ellos pasaron la noche en albergues habilitados por las autoridades, según cifras proporcionadas por el director de la
Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Ricardo Toro. La mandataria se comprometió a reforzar la seguridad y la llegada de
suministros para los damnificados de Tocopilla, donde 500 militares trabajan en la retirada de escombros y barro.
Fuente: Efe
