A sólo nueve días del traspaso de mando presidencial, la bancada demócrata de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos presentó ayer una acusación de "incitación a la insurrección" contra el presidente saliente Donald Trump para que el Senado le inicie un segundo juicio político por el violento asalto de sus partidarios al Capitolio del miércoles pasado.
La presentación se concretó apenas minutos después de que la bancada republicana bloqueara una resolución que pedía que el vicepresidente Mike Pence destituyera a Trump invocando la 25ta enmienda de la Constitución.
El plan de la Cámara Baja, dominada por la oposición demócrata, era debatir y votar de inmediato la resolución. Cuando ese intento fue bloqueado por los republicanos, los demócratas pasaron al plan b: presentar cargos para abrirle un segundo juicio político a Trump.
La acusación, que la mayoría demócrata de la Cámara Baja tratará de votar esta misma semana, según versiones periodísticas quizás el miércoles, hace referencia a las repetidas denuncias falsas de Trump de fraude en las elecciones del año pasado y al discurso que dio a sus partidarios el 6 de enero incitándolos a marchar al Congreso.