Buenos Aires, 16 de noviembre.- Hamás se adjudicó la responsabilidad del ataque, indicando que había disparado un "Kassam mejorado", un M-75, hacia Jerusalén.
Es la primera vez que un cohete de Hamas alcanza las inmediaciones de la ciudad. El brazo armado del movimiento, que gobierna en Gaza, también asegura que ha derribado un F-16 israelí, aunque esto último debe confirmarse.
Horas antes, un cohete cayó en un suburbio de Tel Aviv e hizo sonar las alarmas antiaéreas. El estallido no ha causado víctimas, según informó el canal 10 de la televisión israelí. Pero el disparo hizo sonar las alarmas antiaéreas, como sucediera el jueves por primera vez desde que en 1991 el entonces presidente iraquí, Sadam Hussein, lanzó misiles Scud contra Israel en represalia por el inicio de la Guerra del Golfo.
Al mismo tiempo, un segundo cohete cayó en el mar cerca de la costa de la región próxima a Tel Aviv, informó a Efe el vocero policial, Micky Rosenfeld.
La creciente violencia coincide con la visita a Gaza del premier de Egipto, Hisham Qandil, quién intentó sin éxito lograr una tregua prolongada.
La escalada de violencia coincide con la visita a Gaza del premier de Egipto, Hisham Qandil, quién intentó sin éxito lograr una tregua prolongada. El Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu había decretado un alto el fuego de tres horas para permitir la visita de Hisham Qandil.
Hisham Qandil llegó este viernes a Gaza para transmitir el apoyo de Egipto a los palestinos, al tiempo que intentaba sumar voluntades por un alto el fuego duradero. La intención egipcia, que tiene frontera con la Franja de Gaza, era que los intercambios armados no deriven en una nueva guerra.
